Franchu, entrenador del Victoria, se muestra satisfecho por el pase de su equipo a la siguiente ronda de la Copa de A Coruña, una competición que “pese a las bajas” quiere “tomarse muy en serio porque es muy bonita”. No tanto con el juego de su equipo, que en fases del partido sufrió ante el Atlético Cercedense, de tres categorías más abajo.
“Nos apretaron. Salieron mejor al partido y tuvieron un disparo cruzado que si nos lo meten habríamos tenido que empezar a remar”, comienza analizando el técnico.
“Al principio fue un poco ‘correcalles’, mucho individualismo. Después si que fuimos entrando poco a poco y teniendo más control de juego. Por ejemplo al final de la primera parte dispusimos de un tiro al palo”, explica Franchu.
Ante la pujanza del conjunto dirigido por Rubén García, que logró mantener el empate hasta el descanso, el Victoria tuvo que emplearse a fondo en la reanudación.
“La segunda parte empezó bien. Cometieron un error en salida de balón, robamos e Ivi hizo el 0-1. A partir de ahí tuvimos el partido controlado. Marcó Rumbo también y pudieron ir entrando al campo los juveniles”, explica Franchu, que en esos momentos no presagiaba un final apretado.
“En el minuto 70 nos expulsan a Pedro, luego llegó el 2-1 y ahí nos volvieron a complicar, porque movían bien el balón hacia los lados, buscaban los espacios, etc.”, añade.
En cuanto al estado del campo que se encontraron, señala: “Están jugando ahí otros equipos, pero está muy bien cuidado. Con todo lo que llovió creía que iba a estar peor, pero está en unas condiciones muy buenas. De hecho creo que nos equivocamos en no tener un poquito más el balón, algo más de pausa”.
Sobre como se toma la competición, recalca: “Le doy importancia a todo. La Copa es muy bonita y debimos haber salido con mejor actitud al partido. Soy de los que cree que, aunque haya bajas, no se puede tirar ninguna competición. Obviamente lo más importante es no descender, pero la Copa es muy bonita y si vas pasando rondas y luego te ves ahí en Riazor...”.