El Deportivo Fabril, con sólo tres puntos de los últimos dieciocho posibles, está atravesando una crisis de resultados, pero al menos no se ha ido de vacaciones en puestos de descenso directo. Ocupa el decimotercer lugar del Grupo 1 de Segunda Federación -posición de playout- y buena parte de la culpa de ello lo tiene que ha sumado puntos ante los rivales que se encuentran por debajo en la clasificación. 

La temporada comenzó con tres partidos sin ganar. El déficit del Fabril en esos compromisos fue el aspecto defensivo, siendo incapaz de mantener la portería a cero en ninguno de ellos. Logró empates contra el Real Avilés (2-2) y Marino de Luanco (1-1) y sufrió una derrota en casa contra el Rayo Cantabria (1-3).

A continuación, el equipo dirigido por Óscar Gilsanz encadenó una serie de partidos con una mejoría de sensaciones, un sólido rendimiento defensivo y buenos resultados. 

En la cuarta jornada derrotó en el tramo final a la Arandina -ahora último clasificado- en un partido en el que marcaron Diego Gómez, por partida doble, y Jairo Noriega. 

Esa primera victoria en la categoría insufló confianza al filial blanquiazul, que derrotó con solvencia al Covadonga -en estos momentos, penúltimo- por 0-3. Marcaron Kevin Sánchez, Diego Gómez y Rubén López. Siete días después, en un partido muy cerrado disputado en Abegondo, el Fabril empataba manteniendo la portería a cero frente al potente Compostela.

Buen trabajo

Pese a que en la siguiente fecha el equipo cayó en el campo del Ourense CF (1-0), las sensaciones defensivas continuaban siendo muy buenas y el equipo se repuso de cara a un doble compromiso en Abegondo, primero empatando ante el Zamora (0-0) y luego venciendo al Racing Villalbés, que está en la zona tranquila de la tabla, por 2-0, con doblete de Mati Castillo durante el tiempo de descuento.

Siete días después, en el campo del Gimnástica de Torrelavega -ahora decimoquinto-, el Fabril también lograba sacar un resultado positivo, con un empate 2-2. El duelo mostró la capacidad de reacción del equipo, ya que se vio en hasta dos ocasiones por debajo e igualó con goles de Diego Gómez y Thymos.

Ante el Cayón

A partir de ahí llegó la mala racha con la que el equipo ha terminado 2023. En un lapso de seis partidos, el único triunfo llegó ante el Cayón -marcha en estos momentos en la decimocuarta posición, justo por detrás de los de Gilsanz-.

Y eso que en la undécima jornada, frente al Valladolid Promesas, el Fabril llegó a ir por delante en el marcador, pero terminó perdiendo por 2-3 por culpa de los tantos de Frimpong y Paredes en el tramo final del encuentro.

También se fue de vacío el filial herculino de su visita al Langreo (1-0), pero en Abegondo encontró los tres puntos ante los cántabros, con goles de Iano Simao y Kevin Sánchez en la primera media hora.

Desde ahí, tres derrotas consecutivas, contra Guijuelo (1-0), Coruxo (0-1) y Pontevedra (4-1), con la falta de gol como principal problema. 2024 será otro año, cargado de nuevas oportunidades.