Semana y media después de su fichaje procedente del Silva, el joven portero Adrián Suárez ya ha tenido la oportunidad de debutar con el San Tirso. Lo ha hecho, además, en una jornada que supuso la permanencia matemática para el conjunto de Abegondo.

Este futbolista de 19 años desempeñó en el Ural gran parte de su etapa en el fútbol base, para incorporarse esta temporada al Silva, equipo de Tercera Federación.

Allí disputó tres partidos y expresa que “fue un año en el que aprendí”. Ahora, ante la lesión de Adrián Mallo le llegó la oportunidad de reforzar al San Tirso y no se arrepiente de haber aceptado.

“Hay muy buen rollo. Muy cómodo incluso con los veteranos, que normalmente suele haber ese respeto”, señala.

Un nuevo vestuario que no le es ajeno en ciertos nombres. “Los últimos dos años (en el Ural) estuve en División de Honor con compañeros que tengo ahora en el San Tirso”, apunta el guardameta.

Sobre su debut, en el que su equipo venció por un claro 1-3 al Portomarín, Adri explica: “En la primera parte tuvimos dos ocasiones importantes y en la segunda ya al empezar metimos el primer gol. A partir de ahí tuvimos tranquilidad”.

Asimismo, reconoce que le gustaría seguir, pero tomará la decisión a final de curso.