El Maristas se despidió de toda posibilidad de luchar por el ascenso a la Liga Challenge tras caer (57-72) en su segundo partido en Utebo, eso sí, tras competir de tú a tú con el segundo clasificado de su grupo de la fase regular, el Miralvalle a pesar de la diferencia abismal en triples: los que no anotó (1 de 25) y los que anotó su rival (9 de 16). 

La urgencia de ambos equipos, derrotados en la primera jornada, se notó desde el salto inicial. El equipo coruñés se cobijó en una ordenada zona 2-3, mientras que el extremeño propuso una defensa  individual muy física, lo que provocó posesiones al límite e igualdad (7-7) en los primeros minutos.

Un parcial de 0-6, que pudo haber sido mayor de no errar Shaw dos tiros libres, dio la iniciativa al Miralvalle, aunque tres puntos de Arfinengo (anotó 8 en los primeros 10 minutos) puso de nuevo al frente a las de Fer Buendía (14-13). Entonces apareció Romero, que con dos triples seguidos cerró el cuarto con 16-19. 

La misma jugadora abrió el fuego, también desde el arco, en el segundo acto. Buendía no dudó en pedir un tiempo muerto cuando sólo habían transcurrido 88 segundos. Moyano estiró la renta del cuadro de Plasencia con una bandeja que culminó un parcial de 0-8 a caballo entre el final del primer periodo y el comienzo del segundo.

Dos puntos peleados por Andrea Pérez reactivaron la defensa del Maristas, que con más manos buscando el balón colapsó al Miralvalle. Su técnico, Raúl Pérez, se vio obligado a parar el partido con 20-24. 'Porri' y Vulovic redondearon un 8-0 de vuelta para nivelar (24-24) un marcador que en 8 minutos registró sólo 8 puntos de cada equipo.

 
Pero cuando mejor pintaban las cosas para el Maristas, el Miralvalle volvió a encontrar alivio en los 6.75 metros, con aciertos, sin respuesta, de Morales y Flores. Dos libres de la primera y una canasta a la contra de Shaw subieron al electrónico un nuevo margen máximo (24-34).  El trabajo de 8 minutos se había esfumado en uno y medio.

Al descanso se llegó con 26-34, una diferencia marcada principalmente por la larga distancia: 6 de 16 de acierto del Miralvalle y 1 de 11 de (des)acierto del Maristas.

Otro triple, de Horford, abrió una nueva brecha (27-39) en los primeros compases de la segunda mitad. La garra de Andrea Pérez fue el salvavidas al que se asió el Maristas en esos complicados minutos, en los que siguió creciendo el número de errores desde el arco, así como el de rebotes concedidos en su aro. 

Shaw tomó el timón del Miralvalle para mantenerlo con un superávit de dos dígitos. Y Arfinengo el del Maristas para ponerlo a dos canastas (39-45), pero de nuevo el conjunto extremeño anotó un oportuno triple, este de Lázaro. Aun así, el equipo herculino llegó con vida al periodo definitivo (43-51). Todo un mérito con un 1 de 14 en triples. El único anotado, de Arfinengo, fue el primero. 

La cuenta llegó rápidamente al 1 de 17, con el duelo trasladado ya a la pintura. Entre Shaw y Andrea Pérez. La porriñesa dio el susto al sufrir un mareo, que la tuvo varios minutos tumbada sobre el parquet. Justo después de que Horford anotase otro triple doloroso (51-62) con 6 minutos por delante. 

Galán, con 4 puntos y una falta de ataque provocada, mantuvo al Maristas en la pelea, pero hacía falta más para remontar y los triples siguieron sin entrar (1 de 22) y el Miralvalle se garantizó un final de partido razonablemente cómodo.