El Maristas recibe al Lanzarote (18.00 horas), escasas de jugadoras. El equipo herculino no podrá contar con Paloma y Laura, que son bajas de larga duración. Además, Raquel, que sufrió un esguince en el partido contra el Almería, es seria duda para jugar. Y para colmo, ayer tres jugadores no se pudieron entrenar por estar en un proceso gripal.
Con todo, el equipo entrenado por Fernando Buendía confía en poder lograr una victoria que se les está resistiendo.
Para conseguirla, el Maristas tendrá que imponer “un ritmo alto en defensa, correr bien en ataque y jugar rápido, porque ellas son un equipo veterano”, apunta Buendía.
En este sentido, el preparador señaló que el Lanzarote “es un equipo que juega solo con cinco o seis jugadoras y que les gusta marcar un ritmo lento de partido”.
Sin embargo, esto no excluye la calidad que atesoran pues, “aunque anotan pocos puntos, en defensa lo hacen muy bien, siendo muy agresivas y planteando zonas”, indica Fernando Buendía.
Por ese motivo, el entrenador del Maristas quiere plantear un partido con mucho ritmo, para que no puedan hacer su juego y sufran en las transiciones. Sin embargo, con esas bajas tan importantes, va a ser más complicado poder realizar ese plan.
Con todo, con el apoyo de la afición y con las jugadoras sanas, el Maristas puede lograr una victoria que supondría un subidón de alegría y les ayudaría en futuros encuentros.