Vuelve al abrigo del Palacio de Riazor el Liceo después de tres partidos fuera de casa, las victorias de OK Liga en Voltregà y Alcoi y la derrota de Champions en el feudo del Benfica. Asoma una nueva semana de tres partidos como local: Lleida y Vic en la competición doméstica y, por el medio, el duelo clave europeo contra el Valongo. La importante jornada continental del jueves no debe distraer a Juan Copa y los suyos de la cita que tienen este mediodía. La revelación de la OK Liga visita Riazor. Ojo con el Lleida.
Cuarto clasificado con 25 puntos, solo cinco por debajo del Liceo, es el segundo equipo más realizador del campeonato con 56 goles. Brilla en el apartado anotador un jugador que sonó el pasado año como posible fichaje del Liceo, el argentino Nico Ojeda (16 dianas).
Le siguen Nuno Paiva, el portugués que brilló con el Compañía de María en la temporada de Plata 2019-20 y aporta una docena, y Fran Tombita, el argentino cedido por el Liceo que parece haber encontrado su sitio en Lleida y cuenta siete tantos, además de cinco en la WSE Cup, la antigua CERS en la que tiene puestas muchas de sus esperanzas el conjunto que dirige Edu Amat desde el banquillo.
No es uno de los máximos goleadores del equipo, pero en la pista el jefe de operaciones es el veterano argentino Darío Giménez, un talento puro de 37 años que está de vuelta en el Llista Blava. Defendió la camiseta franjiazul dos temporadas (2016-2018) y ya sabe lo que es ganar y marcar en Riazor.
La defensa sobre Giménez será una de las claves en el partido de este mediodía. “Es un sistema por sí mismo, tiene muchísima calidad y un juego por detrás de la portería muy peligroso”, advierte Juan Copa, que también pide atención sobre los otros dos argentinos en la plantilla catalana: “Ojeda es un jugador con mucho uno contra uno y Tombita está haciendo muy buena temporada y debemos tener mucho cuidado con él en el bloqueo y continuación, en el segundo palo y con las segundas opciones”, avisa el técnico liceísta.
Pasa más desapercibido Antonio ‘Chino’ Miguélez, coruñés de 27 años formado en el Compañía de María que salió muy joven con destino a las categorías inferiores del Barcelona. Llegó a debutar con el primer equipo en la OK Liga, pero después de la pandemia emigró a Italia en busca de oportunidades: jugó dos temporadas en el Montebello y otras dos en el Sandrigo. Ahora está de regreso y el de hoy será un partido muy especial para él, el primero de su carrera profesional en el Palacio.
Del noveno puesto en la pasada campaña (con los mismos puntos que el Sant Just, el último equipo de playoffs) ha pasado a la cuarta plaza en la primera vuelta este curso y será cabeza de serie en la Copa del Rey.
Por su rendimiento, por los nombres propios y porque es uno de los equipos más atractivos de ver, el Lleida es la revelación de la OK Liga y un rival para disfrutar de un bonito partido de hockey este mediodía en Riazor, el primero de tres en la misma semana.