"No merece la pena. No vamos a quedar de llorones". Así respondió Diego Epifanio ante la pregunta sobre las cuestionables decisiones arbitrales en la derrota contra el Gran Canaria (90-98).
El entrenador del Básquet Coruña reconoció que las faltas en contra y los contactos del rival no castigados con personal sí condicionaron a sus jugadores: "Tiene que ser difícil para Trey [Thompkins] ir al poste bajo y que no le piten una falta. Tiene que entender que ya no está en el Real Madrid. Si no le pitan faltas, no puede ir en nuestra contra".
El técnico insistió en el mensaje: "Cada uno tiene que hacer su trabajo: yo tengo que dirigir, proponer los cambios y las tácticas; los jugadores tienen que dar su máximo esfuerzo y los árbitros tienen que pitar. Pero que no nos condicione si pensamos que nos ha perjudicado".