El Básquet Manresa pasó de la gloria al fracaso en cuestión de dos años. Si en el 98 protagonizó la gran sorpresa en los playoffs por el título, el ‘efecto 2000’ no le sentó demasiado bien y perdió la categoría. Y en la LEB cruzó sus caminos por primera vez con un bisoño Básquet Coruña, entonces bajo la denominación de Sondeos del Norte. Se vieron las caras dos temporadas consecutivas (2000-2002): cuatro partidos de liga regular, cuatro victorias para el equipo catalán.
 

Bajo la dirección del venezolano Juan Díaz, el conjunto herculino plantó cara en los dos duelos disputados en la Polideportiva de Riazor (82-91 y 67-52), pero se hundió en sendas visitas al Nou Congost (96-63 y 92-58). En aquel Manresa jugaban Joan Peñarroya, actual técnico del Barça, Jordi Singla, el hombre que tiene el récord de partidos en la historia del club en ACB (366), o Valentín Holgado, que un año antes jugaba en A Coruña.
 

Tuvieron que pasar 16 años más para volver a encontrarse, primero en la liga regular y posteriormente en los playoffs de ascenso de la temporada 2017-18. Un Leyma más ambicioso soñó con el milagro en aquella eliminatoria, pero en el quinto partido de la serie se impuso la lógica. 
 

A cinco partidos

Con Gustavo Aranzana en el banquillo y una plantilla en la que destacaban el internacional Eduardo Hernández-Sonseca, los estadounidenses Zach Monaghan, Trevor Cooney  y Jonathan Gilling y el ruso Dmitry Flis, el equipo coruñés logró la primera victoria de su historia contra el Manresa y en el Nou Congost ya en la fase regular (75-81). En la segunda vuelta cayó como local (66-74) y las posiciones en la clasificación, tercero y octavo, les emparejó en los cuartos de final.
 

Con el favor cancha en contras, el Leyma cayó en el primer partido (70-59), pero fue capaz de arañar una victoria a domicilio (74-80) gracias a la prestación de Monaghan (22 puntos y 6 asistencias), Hernández-Sonseca (15 y 12 rebotes), Flis (17) y Sergio Olmos (15).
 

La marea naranja soñó con la remontada con otra victoria en el tercero, ya en el Palacio de los Deportes de Riazor (75-72), gracias a la portentosa actuación de Cooney (21 puntos con cinco triples) y el apoyo de Hernández Sonseca (14 y seis rebotes) y Zach en la dirección (ocho asistencias).
 

No aprovechó el equipo coruñés la pelota de partido en el cuarto (80-85) y se tuvo que jugar la serie en el quinto y definitivo, de vuelta en el Nou Congost. Tras una primera mitad para olvidar (26-25), el Manresa abrió diferencias en el tercer cuarto (49-42), pero el Leyma se agarró al encuentro hasta los minutos finales, en los que claudicó (71-68) ante el acierto de Gabriel Lundberg (31 puntos). Ni Monaghan (22 puntos) ni Cooney (19 fueron suficientes. El equipo catalán ascendió de la mano de Diego Ocampo, el técnico ourensano que esta temporada está de vuelta en el Nou Congost. El sábado, primer duelo en ACB.