El Liceo agotó dos vidas en las finales de la OK Liga. Sólo le queda una y se la jugará delante de su gente. Después de perder los dos primeros partidos contra el Barça en el Palau Blaugrana, la serie cambia de escenario y el Palacio de Riazor se teñirá el jueves de verde (20 horas, TVG2) para arropar a su equipo. El objetivo no es cosa menor: evitar el alirón azulgrana.
El club coruñés dejará pasar gratis al recinto a las personas que vistan una prenda verde. Todo suma. Y el equipo necesita el apoyo masivo de su afición, el ambiente de las grandes ocasiones, para tratar de intimidar a un rival que no se achica, pero que no estará tan cómodo como en su pista.
Los precedentes históricos no son nada alagüeños: sólo un equipo remontó una eliminatoria con 2-0 en contra, el Igualada contra el Reus en 2004. Las estadísticas están para romperlas, dicen. Y si hay un equipo capaz, ese es el Liceo, acostumbrado a luchar contra lo imposible, también contra la historia.
Juan Copa y sus jugadores tendrán que cambiar algunas cosas para alterar el guión de las finales. El equipo compitió bien en el Palau, pero la contundencia en las áreas, con errores propios en defensa y falta de acierto en ataque, le lastraron ante un Barça que no perdona.
El Liceo tendrá que tomar un nuevo camino en el tercer partido. Los ataques en estático, con posesiones largas, no le han dado muchos frutos –sólo dos goles en 100 minutos– ante la defensa azulgrana y el muro Sergi Fernández. Quizá le venga bien un escenario más abierto para aprovechar uno de sus puntos fuertes: el contraataque.
El peligro de abrir la pista para el Liceo es que también dejaría más espacios para los talentosos patinadores y definidores del Barça, mención especial para Pau Bargalló (3 goles) y João Rodrigues (4), los dos hombres de las finales hasta el momento.
Con cuatro días de descanso (activo) desde el segundo partido, pero una importante carga desde que empezaron los playoffs, también entra en juego la batalla física. Con un jugador más de pista en la rotación –el barcelonista Joan Pascual está inédito en las finales–, Juan Copa los tiene a todos enchufados y no dará la convocatoria hasta hoy. Es una cuestión de vida o muerte.