El Deportivo Liceo está contra las cuerdas. Encajó su segunda derrota en el Palau y el Barça sólo necesita una victoria más para proclamarse campeón de la OK Liga. Como el jueves, el equipo coruñés plantó cara en varias fases del partido, pero la diferencia de acierto en las áreas inclinó la balanza a favor de los locales.

Con 2-0 en el marcador, la serie viajará ahora a Coruña. El Liceo necesita el apoyo masivo de su afición para tratar de alargar las finales: el jueves se disputa el tercer partido en el Palacio de los Deportes de Riazor, escenario del cuarto, si fuese necesario. El hipotético quinto y definitivo duelo sería nuevamente en el Palau.

Juan Copa realizó un cambio en el cinco inicial respecto al primer encuentro de la eliminatoria. Dio entrada al internacional francés Bruno Di Benedetto en lugar de Sito Ricart, que empezó desde el banquillo. Martí Serra, bajo los palos, César Carballeira, Dava Torres y Àlex Rodríguez completaron el quinteto titular.

Y el cambio dio sus frutos en la primera jugada del partido: un remate de Bruno que salió fuera por poco. Respondió el Barça, con los sospechosos habituales en su quinteto, y Pau Bargalló probó con un tiro mordido los reflejos de Serra, otra vez el mejor de los liceístas en Barcelona.

Tres minutos

La resistencia de los verdes duró tres minutos, lo que tardó Hélder Nunes en abrir la lata con un potente palazo tras un pase del coruñés Ignacio Alabart. Con tantos cuerpos en el área, es probable que Martí no viese salir el remate, y el portugués clavó la bola en el ángulo de la portería coruñesa.

El 1-0 reforzó el plan de Edu Castro y los suyos, muy cómodos cuando juegan por delante en el marcador. El Liceo se levantó, como siempre, pero se encontró una y otra vez con un muro. Lo probaron Bruno, Dava, Àlex y Pol Manrubia, pero Sergi Fernández cerró todos los huecos.

Martí también se mostró muy seguro bajo palos ante las acometidas del Barça, las mejores para Nunes, Sergi Llorca, Marc Grau y Sergi Panadero cuando los hombres de la segunda unidad tomaron el relevo.

En un partido otra vez muy igualado, los pequeños detalles marcaron la diferencia, como el segundo gol del Barça, que llevó la firma de João Rodrigues, más vivo que la defensa liceísta para recoger un rechace de Serra y embocar la bola en la portería. Un nuevo jarro de agua fría a dos minutos del descanso.

Cuesta arriba

Con 2-0 en el marcador, al equipo coruñés le tocaba remar otra vez contracorriente. No bajó los brazos y lo intentó todo Juan Copa, que le dio otro giro al cinco en la salida del segundo tiempo: Manrubia y Sito acompañaron a César y Dava par buscar nuevas combinaciones y alternativas.

El conjunto coruñés rondó el 2-1 en un contragolpe que César no resolvió con acierto y en una doble ocasión, primero un palazo del propio César y luego el rechace de Sito, pero los dos se toparon con el muro Fernández.

El mazazo definitivo fue el tercero, obra de Pau Bargalló en una gran acción individual. Ni con el 3-0 bajó la guardia el Liceo, que evitó la goleada gracias al acierto de Martí Serra en la pelota parada. El Barça dispuso de hasta cuatro faltas directas con cuatro lanzadores diferentes: Bargalló, Rodrigues, Alabart y Nunes se toparon con el guardameta, inspiradísimo.

No pudo la defensa liceísta con las situaciones de inferioridad y, en un rechace, Marc Grau firmó el 4-0. Tampoco estuvieron acertados en la bola parada los verdes: Àlex falló una directa y César un penalti. Antes de la pena máxima, Dava anotó el gol de la honra, un 4-1 que deja sin red al campeón. l