La selección española de hockey patines debutó con derrota por 4-2 ante la anfitriona Argentina en el Campeonato del Mundo que se disputa en San Juan, en un gran partido que no se decidió hasta los últimos minutos.

España salió a la pista muy concentrada y con una defensa portentosa, su mejor apuesta durante todo el primer tiempo, con Bargalló conduciendo al equipo con soltura y aprovechándose de una Argentina nerviosa, que perdía rápido la bola y cometía demasiados errores en salida.

Esos errores fueron aprovechados por el combinado nacional que, a los 5 minutos, marcaron el primer tanto del partido, obra de Toni Pérez tras un buen pase de Xavi Barroso.

Tras el gol, el partido ganó en igualdad por parte de ambos conjuntos y eso se tradujo en muchos minutos de juego sin ocasiones claras. En el minuto 10, Sergi Fernández paró una falta directa a Nicolía tras una tarjeta azul a Ferran Font.

5 minutos más tarde, Sergi Aragonés envió una bola al larguero en una ocasión muy clara para el 55 de la absoluta. Tan solo 3 minutos más tarde, Lucas Ordoñez consiguió el empate para los argentinos al transformar una falta directa tras una polémica tarjeta azul al capitán del Liceo, Dava Torres. 

A los 21 minutos de partido, Pablito Álvarez consiguió rematar dentro del área y poner el 2-1 para Argentina en el marcador, resultado con el que se ha llegado a la media parte. 

Mayor intensidad

Tras el descanso y la quinta cartulina azul del partido, Lucas Martínez tuvo en otro lanzamiento a bola parada  para lograr el tercer gol. Por suerte, el argentino fallaría esta ocasión.  Quien no iba a fallar era Pau Bargalló, que transformó el penalti señalado or los colegiados.  

Con todo, en la jugada siguiente, Ordóñez volvía a poner en ventaja a Argentina con un potente disparo que no pudo detener el meta español. 

El tanto suramericano hizo daño a la selección, el cuadro albiceleste buscó amedrentar el choque, con miedo a cometer la décima falta y darle una ocasión de oro a España, pero el equipo de Guillem Cabestany no supo encontrar la solución, hasta que, de nuevo Ordóñez, sentenció el partido con un "hat trick" a tres minutos de la conclusión.