Jon Rahm jugará otro fin de semana grande. Y van 17. El golfista vizcaíno pasó el corte del Abierto Británico, aunque no exento de sufrimiento, en el duro ‘link’ del Royal Liverpool Club. Con una tarjeta de 70 golpes, uno bajo el par, llegará al ‘moving day’ a doce impactos del líder, el sorprendente Brian Harman (-10). La Jarra de Clarete se complica para el León de Barrika.
Rahm empezó el día muy muy sólido desde el tee y seguro con el putter. Tras cuatro hoyos al par, firmó sus dos primeros birdies en el 5 y el 6, un impulso que se desvaneció con dos bogeys, también consecutivos, en el 4 y el 5.
El número 3 del ranking mundial, provisionalmente fuera del corte, embocó varios putts que le salvaron del desastre y aprovechó el par 5 del 15 para sacar un birdie importantísimo que le relanzó, con otro birdie en el 17, aunque en el 18 se enzarzó con un bogey para cerrar el día con -1 para el +2 total.
“He hecho bajo par, que es complicado en un campo como este –sólo 30 de los 156 jugadores dejaron su tarjeta en rojo el segundo día en el Royal Liverpool–. Voy a recordar los cuatro putts que he fallado desde cuatro pies, que es algo que no te puedes permitir en un grande, pero creo que he maximizado mi ronda. Obviamente mi juego me deja un sabor amargo por cómo fue el último”, se sinceró Rahm en la rueda de prensa.
“De lo que estoy orgulloso es de que he luchado en los momentos en los que hacía falta, como después de los bogeys del 9 y el 10. Justo en los hoyos que seguían, el día se podía haber liado mucho y no ha pasado. El tercer golpe del 12 me ha dado ánimo para seguir bien y creo que, en general, ha sido un buen día”, confesó.
“Me da pena el putt del 10 y el del 18 pero por lo demás fue un buen día, aunque no estuve particularmente bien con los hierros. Sí que salvé muy buenos pares y mantuve la vuelta en su sitio. El final no lo afronté con la idea de ir haciendo birdies en los dos últimos porque luego el fin de semana no sabes qué va a pasar”, zanjó.
Adrián Otaegui, que mantuvo su posición en el ‘top 10’ pese a una segunda jornada con dos golpes por encima del par (73 para un total de 140, -2), y Rahm son los dos únicos españoles que pasaron el corte en el Open. Pablo Larrazábal (+4) se quedó a un golpe de jugar el fin de semana, pero tendrá que guardar sus palos, como los debutantes Josele Ballester (+5) y Alejandro Cañizares (+12) o Jorge Campillo (+14) y Adri Arnaus (+21).
El hombre del día fue Brian Harman, líder sólido del torneo con un espectacular -10 tras acabar la segunda jornada con -6 gracias a cuatro birdies consecutivos del hoyo 2 al 5 y un tremendo eagle en el 18 en una vuelta libre de bogeys. El estadounidense de 36 años tiene cinco golpes de ventaja sobre el inglés Tommy Fleetwood (-5) y seis sobre el austríaco Sepp Straka (-4).