El jugador del FC Barcelona y de la selección española Pedro 'Pedri' González aseguró que trabajar con Xavi Hernández en el equipo blaugrana es un "orgullo" y un "privilegio" para él, y auguró que van a mejorar mucho a su lado porque el de Terrassa sabe de fútbol "como pocos".
"Como barcelonista es un orgullo; como futbolista, y centrocampista como yo, un privilegio. A Xavi no lo conocía personalmente y, aunque no tenía dudas, en el día a día está demostrando que sabe de fútbol como pocos", aseguró en declaraciones en la primera edición global de 'GQ SPORTS' recogidas por Europa Press.
En este sentido, añadió que tiene claro que todos los jugadores van a "aprender y mejorar" al lado de Xavi. "Con él, y con el equipo que está formando, nos vamos a llevar muchas alegrías", manifestó el centrocampista canario.
"Destaco su cercanía y su capacidad para transmitir lo que ve y lo que quiere en cada momento. Táctica y técnicamente ha sido siempre un referente para cualquier centrocampista", reconoció, en este sentido, un Pedri que se recuperó hace poco de una lesión.
Además, también celebró el ambiente que se vive en el vestuario, que es "muy bueno". "No sólo entre los jóvenes; también con los veteranos. Yo, por ejemplo, me llevo muy bien con 'Busi'. Mis mejores amigos diría que son Eric, Ansu y Ferran Torres", reconoció.
Preguntado por su figura, por su peso en el Barça y en la selección a sus 19 años, se sinceró: "Yo no pienso si soy o no todavía una promesa". "Para mí, la edad no es importante. Lo importante es seguir creciendo y ser importante con el Barça y con la selección, como lo fui el año pasado", aportó.
"Estos meses parado me han ayudado a madurar, a ver en qué tengo que trabajar y mejorar, y a darme cuenta de que todo ha ido muy rápido y he sido un privilegiado. Pero, obviamente, no me arrepiento de todo lo que me ha pasado ahora. No cambiaría nada", manifestó sobre su agotadora primera temporada en la elite.
Por otro lado, se mostró agradecido con su excompañero Leo Messi, ahora en el PSG francés. "A Leo le agradeceré siempre que me ayudase mucho tanto en el campo como personalmente. Jugar con él era muy fácil, por algo es el mejor del mundo, y lógicamente nos ha costado acostumbrarnos a no tenerlo al lado", señaló.
A nivel más personal, reconoció que su vida es el fútbol. "Estoy haciendo lo que siempre había querido, no me había planteado otras opciones, aunque lógicamente mi familia y mi gente son igual de importantes", manifestó.
"Como buen isleño, me encanta el mar, que aquí también lo tengo cerca, aunque me da mucha rabia cuando voy a la playa y veo la suciedad que hay.
Siempre intento recoger dos o tres piezas de basura y tirarlas al contenedor. No cuesta mucho, y creo que es fundamental. Es por eso por lo que yo colaboro como embajador con la fundación Kick Out Plastic", señaló, ejerciendo a favor de la lucha medioambiental.
Aunque, de hecho, su vida en Barcelona es "muy tranquila". "Cuando no tengo que entrenar, lo que más me gusta es estar en casa viendo series o jugando a juegos de mesa, al ping-pong o a la 'Play' con mi hermano. Sigo viviendo con él, y mis padres ahora nos visitan a menudo", aportó.