Iñaki Williams avanzó este miércoles que el Athletic debe seguir aspirando a entrar en la Liga Europa, a pesar de la mala racha en la que se encuentra, con un solo punto de nueve posibles, y de que está de ella a cinco puntos con solo cinco partidos por disputarse.

"No tenemos que pelear por lo mínimo, tenemos que aspirar también a la Europa League", consideró el mayor de los Williams en la rueda de prensa que ofreció en Lezama, a unos días de visitar el sábado al Villarreal, unos de los equipos que ocupa plaza para la segunda de las competiciones continentales, con siete puntos más que el equipo de Ernesto Valverde.

El veloz delantero, no obstante, asume que las mayores posibilidades europeas pasan por una Liga Conferencia de cuyo puesto -el séptimo- se cayeron tras el "palo" de la derrota del jueves último en San Mamés frente a un Betis al que querían haber superado en la tabla y que ahora tienen a cinco puntos, ya fuera de unas posiciones europeas que "siguen siendo el objetivo" de la temporada.

Williams confesó que el del jueves pasado fue uno de esos días en los que los jugadores del Athletic se han "ido jodidos a casa porque era uno de los partidos en los que dar un golpe sobre la mesa" y no lo hicieron. Pero también reparó en que si algo tiene este equipo es que "vuelve a responder".

Y, en ese sentido, avanzó que tienen "la esperanza y la actitud necesaria" para "afrontar los 15 puntos que quedan e ir a por ellos" ya desde este sábado "ante un rival directo". Un Villarreal que cuenta con "una plantilla increíble, con muchos jugadores de mucha calidad, muchos recursos y que está haciendo una segunda vuelta increíble". "Va a marcar nuestro futuro, pero no va a ser decisivo", adelantó sobre el partido.

"En momentos claves no hemos respondido, o nos ha faltado esa pizca de suerte o no ha entrado la pelota. Muchas veces es frustrante, pero de nada sirve lamentarse. Hay que sumar porque los de abajo también vienen apretando", resumió el estado de ánimo del Athletic.

A pesar de ello, ve a su equipo "bien" y "con confianza". "Somos de los cinco equipos que más goles meten. En partidos que había que dar un golpe sobre la mesa nos ha faltado, pero el equipo genera muchísimo. A pesar de estas ultimas derrotas y empates, creo que está bien y generando mucho", insistió.

Williams asume que no lograr una plaza europa por sexta temporada consecutiva "sería triste" para la plantilla rojiblanca, pero "no lo llamaría decepción". "Sí que sería un mazazo para todos, pero no es algo que me planteo porque creo que el equipo va a ir a Europa, que es lo que todos deseamos", se animó al respecto.

Ya en lo personal, desveló que le "gustaría" superar en este curso la marca de 13 goles que tiene como mejor registro goleador en Liga en una temporada. "Es un registro que siempre me planteo superar y me gustaría superar", dijo un Williams que asume el reto de lograr cinco goles en los cinco partidos que quedan, ya que lleva 9 tantos en lo que va de liga.

"Es cierto que estos últimos partidos en banda estoy encontrando la portería y eso te sube la autoestima, es una posición en la que me siento cómodo", apuntó sobre su regreso a la banda, donde jugó al inicio de su carrera, también con Ernesto Valverde.

El mayor de los Williams se refirió también al episodio de críticas en las redes sociales que sufrió su hermano Nico después de fallar varias ocasiones claras en el choque ante Osasuna que les descabalgó de la final de Copa.

"La cara B de las redes sociales tiene estas cosas que uno no puede controlar y que lamentablemente están ahí. A todos en nuestra carrera nos ha tocado vivir estas cosas desagradables y yo, como hermano mayor, le dije que no tiene que dudar de él porque cuatro anormales se metan con él", desveló, contento de que Nico se "tomase la revancha rápido marcando al Espanyol" en la siguiente jornada,
 

"Ha aprendido una lección y creo que le va a servir de cara el futuro para manejar mejor sus emociones", zanjó.