El deportivismo recordará 2024 como un año de felicidad. Supuso el fin de la pesadilla en la ‘C’ que se prolongó durante cuatro temporadas, con la mejor racha de partidos sin perder en la tercera categoría y en la historia del club, levantar la Copa de Campeones como rey absoluto de la Primera RFEF y el retorno al fútbol profesional, más difícil de lo esperado, moviéndose siempre cerca de los puestos de descenso y que tuvo un amargo cierre de la primera vuelta, con ese 0-4 ante el Mirandés en Riazor.
La escuadra blanquiazul lució una tarjeta prácticamente inmaculada durante la primera mitad del año. Una sola mancha, en el segundo de los 23 encuentros de Primera RFEF que disputó durante 2024. Los de Imanol Idiakez estrenaron el año el 4 de enero con una victoria en Riazor sobre la Real Sociedad B (2-1) en la penúltima jornada de la primera vuelta. Lucas Pérez firmó sus dos primeros goles del curso liguero, que sirvieron para reactivar el instinto asesino del ‘7’, que terminó siendo el máximo artillero del equipo con quince dianas, incluida la que certificó el ascenso a Segunda.
En la siguiente cita, que supuso el cierre de la primera vuelta, llegó el único traspié de los coruñeses. Fue en León ante la Cultural (1-0), donde un tanto de Muguruza originó esa última derrota de los herculinos en Primera RFEF.
A partir de ahí, el Dépor activó el modo rodillo y enlazó 21 partidos sin morder el polvo, los 19 de la segunda vuelta de la liga regular y los dos de la Copa de Campeones frente al Castellón. La mejor racha de la historia de la entidad, superando la anterior, los 18 encuentros sin perder en Segunda B en la campaña 1980-81.
TOP EN 2ª
Las manitas a Albacete, Cartagena y Castellón y el 2-4 en Cádiz
En el momento en el que el cuadro herculino perdió en el Reino de León era sexto del Grupo 1, a dos puntos del playoff de ascenso y a diez del liderato que ocupaba la Ponferradina. Siete jornadas después, los blanquiazules, que firmaron un pleno de victorias, eran líderes con un punto de ventaja sobre el segundo, el Nàstic, y un colchón de ocho puntos sobre el sexto.
Siete victorias seguidas en las que el Dépor tumbó a dos rivales de la zona alta, como la Ponferradina (2-0) y el Celta Fortuna (1-2), y arrolló de forma consecutiva a Fuenlabrada (4-1), SD Logroñés (0-5), Tarazona (4-1), Osasuna Promesas (0-4) y Lugo (4-1) en una espectacular serie en la que los coruñeses marcaron 21 goles en cinco encuentros, con la mejor versión de Lucas, quien anotó y asistió en esas cinco jornadas, con seis tantos y nueve pases de gol.
Desde entonces, el Dépor se mostró imparable, selló el ascenso ante el Barça Atlètic en la antepenúltima jornada y puso el broche a su espectacular segunda vuelta con el doble triunfo sobre el Castellón —campeón del Grupo 2— en la Copa de Campeones.
El regreso al fútbol profesional no ha resultado sencillo. Nada que ver con el paseo de los blanquiazules en Primera RFEF entre enero y junio. El Dépor solo sumó dos victorias en las doce primeras jornadas en Segunda División. Por el contrario, sufrieron seis derrotas y firmaron cuatro empates. Números que dejaron al cuadro herculino en el antepenúltimo puesto de la tabla con 10 puntos, a dos de la permanencia. Estas cifras provocaron la destitución de Imanol Idiakez.
Óscar Gilsanz, técnico del Fabril, sucedió al vasco en el banquillo y el Dépor se reactivó, aunque sin despegarse de la zona de peligro y con un cierre de año que ha dejado un regusto amargo con ese abultado 0-4 en Riazor. Cuatro victorias —con goleadas en Cartagena, Cádiz y ante el Castellón en Riazor—, dos empates y dos derrotas ha encajado la escuadra blanquiazul desde la llegada del entrenador betanceiro. Estos números han permitido a los deportivistas despedir 2024 con tres puntos sobre la zona de descenso, con un partido menos, al tener pendiente el aplazado frente al Tenerife, correspondiente a la decimonovena jornada.
Otro lunar fue el de la Copa del Rey, donde los herculinos cayeron a las primeras de cambio en el campo del Ourense CF (1-0) de Primera RFEF.
A nivel institucional, el 26 de junio, Álvaro García Diéguez anunció que dejaba la presidencia del Dépor y el 9 de julio, el club adelantó que el elegido para convertirse en el mandatario número 50 de la historia de la entidad era Juan Carlos Escotet, quien asumió el cargo de manera oficial el 11 de octubre, en la junta de accionistas.
El dueño de Abanca, cuarta fortuna de España, según la Lista Forbes de 2023, cuenta con un equipo formado por su sobrina Michelle Clemente Escotet como vicepresidenta, Massimo Benassi de consejero delegado y los consejeros Marta Fernández Currás, Benito Couceiro Naveira, Carlos Ballesta y Vicente Fernández.