El encuentro entre el Deportivo y el Racing de Santander fue suspendido ayer por el Juez de Competición poco después de las cuatro de la tarde, pero el aplazamiento comenzó a gestarse mucho antes.

Este viernes, en la rueda de prensa prepartido, el técnico del equipo santanderino, Guillermo Fernández Romo ya había anunciado que la intención del club era pedir la suspensión debido a la detención de dos casos positivos: el de Patrick Soko, ya con síntomas y que había tenido minutos en la victoria ante el Racing de Ferrol, y el de su capitán Iñigo Sainz-Maza, anunciado por el club ese mismo día por la mañana, tras haberse hecho el jugador un propio test a título personal.

Asimismo, desvelaba que había tenido conocimiento de la aparición de casos en el Racing de Ferrol, su rival del miércoles, lo que le había generado intranquilidad.

“Me ha preocupado mucho la situación de que tengamos un brote abierto, encima con la relación que vamos a tener que viajar, seis horas en bus, hotel... lo hemos puesto en conocimiento de la Federación y se ha solicitado ese aplazamiento”, argumentaba. No obstante, la Federación solo informaba del aplazamiento del Real Unión-Real Valladolid Promesas, al detectarse hasta 11 casos en el conjunto local.

Viaje interrumpido

Ayer al mediodía, a pesar de no tener noticias de la Federación e iniciar su preparación para viajar, la expedición cántabra se bajaba del autobús a la espera de una respuesta a su petición de aplazamiento, a pesar de que el número de positivos, tras realizar los pertinentes test de antígenos, seguía siendo de dos.

Con tres casos en el Racing confirmados y planeando ya la suspensión de su duelo ante el Rayo Majadahonda por el mismo motivo, el Depor, sin noticias de ningún aplazamiento (fue informado a las 16.01), subía poco antes de las tres la convocatoria para el choque, con las cuatro bajas confirmadas.

No era hasta pasadas las cuatro de la tarde cuando el Twitter de la RFEF emitía sendos comunicados informando de los aplazamientos del Racing de Ferrol- Rayo Majadahonda y del Deportivo-Racing de Santander, argumentando ‘motivos sanitarios’ y ante el riesgo de que pudieran producirse más casos y un potencial brote.