Regalo de Reyes anticipado para el Deportivo y el deportivismo, al que el club sorprendió en plena preparación de la cena de Nochevieja con una esperada noticia: el regreso de Lucas Pérez.
La entidad herculina oficializó a las 19.06, hora de los fichajes y año de la fundación del club, la llegada del ariete de Monelos, que ficha por lo que resta de temporada y una más.
El propio jugador se despedía esa tarde del Cádiz en sus redes sociales ese mismo día. “Cadistas, llegué hace un año con el objetivo claro de la salvación y lo conseguimos! Quiero agradecer a la afición, al club y a la ciudad el cariño que me habéis mostrado en este tiempo. Me voy a cumplir un sueño! Siempre os desearé todo lo mejor, lo merecéis!”, decía en redes.
La operación al fin fructificó, tras muchas idas y venidas, que ya habían empezado en el mercado estival, cuando Manuel Vizcaíno impedía la salida del ariete rumbo a Coruña. Con la cercanía del mercado invernal, Lucas, al que desde Cádiz siempre han alabado por su profesionalidad, volvía a pedir su salida, y comenzaron de nuevo los contactos entre el Depor y el ariete.
No obstante, cuando más claro parecía la propiedad daba marcha atrás y la operación para su retorno parecía complicarse de forma irreversible, como así reconocía a este diario el entorno más cercano del futbolista.
Pero, todo cambiaba este viernes, con un nuevo giro de guion, digno de un documental. Según comentaba el citado rotativo digital gaditano, la salida del jugador era inminente. Una marcha, después de que el de Monelos rescatase un punto ante el Almería, saliendo desde el banquillo y marcando.
El diario apuntaba a que la operación estaba prácticamente cerrada, por un montante de un millón de euros, la misma cantidad que desembolsó el cuadro gaditano al Elche hace un año para hacerse con los servicios del ariete.
Aunque los detalles de la operación no han trascendido de forma oficial, según ha podido saber este diario, el punta asumirá un parte del montante y otra la irá abonando poco a poco el Deportivo, a plazos.
Además, el acuerdo incluiría un contrato de larga duración y cuando el futbolista colgase las botas, pasaría a formar parte del organigrama técnico del club. La propiedad, que en su momento había cerrado la puerta a la vuelta del delantero coruñés, habría, según las informaciones de La Voz Digital, cambiado su parecer para dar así luz verde a una operación que se terminó por hacer oficial a la citada hora mágica.
Presumiblemente Lucas se incorporará a los entrenamientos mañana, en Abegondo, lo que podría crear una gran expectación entre las afición en plenas vacaciones de Navidad. Además, estará ya a disposición de Óscar Cano y podría debutar en el primer partido del año 2023 para el Depor, el 8 de enero ante Unionistas