Segundo partido consecutivo en el que Miku Fedor se deja prácticamente la cara. Además, como novedad, fue el primer encuentro que jugó de suplente en esta campaña.
En la última jugada del choque ante la SD Logroñés el delantero venezolano se llevó un puñetazo al tratar de rematar un córner.
El trencilla pitaba el final y el ariete quedaba conmocionado sobre el campo. Era atendido por los galenos del club y en principio, reconocido por él a los medios de comunicación desplazados a La Rioja, todo se había quedado en una nueva contusión.
No es la primera vez, ya que la semana pasada ante el Real Unión de Irún el atacante pudo ser objeto de penalti a final de la primera parte. Miku se fue al suelo y se pudo ver como tenía la ceja partida. Una circunstancia que le suponía tener que salir del campo, le costaba la tarjeta a Juergen por protestar y varios puntos de sutura en la ceja del ariete. Otro fin de semana accidentado para Miku, que en la pasada jornada contra el Real Unión volvía a fallar un penalti, el segundo en esta temporada.
Miku entró en la segunda parte por un desafortunado Quiles, pero tampoco estuvo acertado el futbolista venezolano de cara al arco rival.
No gozó tampoco de muchas oportunidades, en un partido en el que el Deportivo abusó en varias ocasiones de la conducción y tardó en ser incisivo. Un juego por momentos demasiado lento, que hacía imposible encontrar las vías por las que hacer daño a un equipo de Raúl Llona, cómodo defendiendo su ventaja y achicando balones cuando era necesario.
Los locales acabaron con una línea de cinco atrás, lo que dificultó más la labor de Miku y Noel, que terminaron siendo las referencias ofensivas del Deportivo en la jornada de ayer. Sí que tuvo el futbolista de Venezuela en sus botas la oportunidad de marcar gracias a una acrobática chilena, pero el balón se marchó alto.
También lo pudo lograr tras un remate de cabeza, pero que se fue desviado de la meta defendida por Arturo Vidal, sin mucho trabajo en el partido, puesto que apenas hubo disparos del Deportivo entre los tres palos.
Una mala tarde no solo en el área blanquiazul también en la rival, donde los atacantes del cuadro que entrena Borja Jiménez volvieron a irse de vacío, tras tampoco marcar ni Quiles ni Miku, como el fin de semana pasado, en el Abanca Riazor ante el Real Unión.