El fútbol está lleno de tópicos, como cuando te eliminan de la Copa. A centrarse en la Liga, dicen. Y eso es lo que hará el Deportivo tras su mal partido en Guijuelo. Los de Segunda Federación pusieron fin al camino de los de Óscar Cano en la primera eliminatoria.

Con un buen planteamiento y dos goles en tres minutos en la segunda parte, el Guijuelo se llevó el partido en ese feudo inexpugnable que es el Luis Ramos.  

A los ‘jamoneros’ no le importa que la tenga el rival. Esa propuesta le da sus frutos en la categoría de bronce, en la que marcha segundo clasificado de su grupo, y lo demostró ante el Deportivo. Así fue el inicio del partido en la superficie sintética de Guijuelo. Monopolizaron el dominio los blanquiazules, pero no lo rentabilizaron. 

El equipo local, intocable en su campo en Liga (cinco victorias en otros tantos partidos y ningún gol encajado), no tardó en encontrar fisuras en la retaguardia deportivista. Coque obligó a Pablo Brea a sacar los puños por primera vez a los cinco minutos de encuentro. El guardameta comenzó así a despejar las dudas que sembró la temporada pasada. 

Un robo de Gorka Santamaría propició la mejor ocasión de los herculinos antes del descanso. El vasco asistió a Kuki Zalazar, que probó a Roberto y provocó un saque de esquina a los ocho minutos. 

El partido avanzó con más protagonismo para el Guijuelo ante un gris Deportivo. Los chacineros se mostraron como un equipo muy bien organizado. Coque no le dio el premio de adelantarse a los 17 minutos con un disparo al lateral tras un buen desmarque en la banda derecha. 

El juego no fue lo peor del Deportivo. Ya se sabía que el césped artificial aumenta el riesgo lesional y Diego Villares fue la primera víctima del campo salmantino. El de Vilalba se lesionó en el minuto que luce en su dorsal, el 22. 

Un disparo de Toti fuera puso el punto final al primer periodo y el segundo comenzó con polémica en el área del Deportivo por una caída de Carmona ante Pablo Brea en un balón dividido. El jugador del Guijuelo intentó sembrar dudas en el colegiado en una acción en la que estaba en desventaja ante el arquero.

Salieron con fuerza los salmantinos tras el intermedio. Pablo Brea tuvo que volver a desplegar los puños tras un disparo de Coque y Davo mandó el cuero arriba. 

También hubo polémica, pero ligera, en el área del Guijuelo en una caída de Yeremay en la que no había penalti. Y así se llegó al primer gol de los locales, a los 69 minutos, obra de Carmona con una rosca con la izquierda tras un gran desajuste de la cobertura blanquiazul. 

Brea aplazó el segundo del Guijuelo en una falta lateral a los 72 minutos con un remate de Perea que fue al muñeco, pero en la siguiente acción, en el saque de esquina, Kuki, en su intento por despejar el centro de los salmantinos, batió a su portero. 

Al resultado se unió otra lesión, la de Víctor Narro, que se llevó la mano al tobillo izquierdo. 

El Deportivo empujó en los diez últimos minutos para intentar meterse en la eliminatoria. Un córner de Yeremay que conectó Trilli fue la más clara, pero Roberto atajó en dos tiempos. El lateral, que acabó jugando como central, también la tuvo en una falta lateral que ejecutó bien Kuki y a la que esta vez no llegó el canterano. 

Y así acabó el efímero paso del Deportivo por la Copa. No le dará más sorbos este año. Si asciende, será para bien.