El estadio de Riazor se vistió ayer de gala en una fría noche para asistir al derbi de las Rías Altas entre Deportivo y Racing de Ferrol, con la mejor entrada en lo que va transcurrido de temporada 22-23; un total de 18.452 espectadores no se perdieron una victoria tan trabajada como justa por parte de los herculinos. Cerca de un millar de adeptos del Racing de Ferrol abarrotaron la grada visitante del coliseo coruñés.