“Tenía una vinculación muy grande con A Coruña, y eso derivó en cariño hacia el Depor. Además de realizar campus con exjugadores bastante reconocidos aquí, como es Fran. Eso fue consecuencia de tener un gran cariño hacia el Deportivo”. Así se expresaba Luis Quintero, el pasado 1 de febrero, refuerzo de invierno del Depor, que llegaba en calidad de cedido, procedente del Villarreal, y que cumplía un sueño recalando en el club herculino.
Cuatro meses después, el extremo hispano-colombiano no ha conseguido tener la presencia seguramente esperada en el cuadro blanquiazul y los datos dicen que es el único jugador de la primera plantilla que no ha sido titular en esta campaña.
Tampoco parece que este domingo, de inicio, vaya a ser de la partida en Castalia, donde todo apunta a que Imanol Idiakez tocará pocas teclas de cara al choque de vuelta de la Final de Campeones contra el Castellón.
Quintero sólo ha disputado 38 minutos en esta temporada, repartidos en un total de cuatro choques. En todos ellos el Deportivo puntuó, con un balance de tres victorias y un empate, pero su presencia en los partido fue escasa. Debutó el 10 de febrero, en la jornada 23, saliendo desde el banquillo, en el tramo final de la contienda que se saldó con triunfo ante la SD Logroñés (0-5). Repitió la siguiente, en Riazor, en la victoria contra el Tarazona (4-1) e ingresó en el campo en el añadido. Tardó 13 jornadas en volver a tener minutos y no fue hasta la 37, frente a la Real Sociedad B, con el Depor ya ascendido, cuando volvió a tener protagonismo.
Saltaba así al campo en el 73, para jugar algo menos de quince minutos y contribuir al empate con el Sanse (1-1).
Su última aparición, en campaña regular, fue contra el Real Unión, jugando 13 minutos en un choque en el que se impusieron los herculinos (3-1).
Ya fuera del campeonato, Quintero también salió desde el banquillo en la recta final del choque de ida de la Final de Campeones, disputado este miércoles.
Un partido en el que, a la conclusión, se vio a Quintero emocionado, dirigiéndose a la grada de los Riazor Blues para darles las gracias por el apoyo recibido.
Un punto y final de su aventura con el Depor, que termina esta noche y en la que, a expensas de lo que pase en Castalia, nunca ha conseguido ser titular en el club en el que cumplió el sueño de jugar.
Pablo Vázquez, incombustible en liga, Copa y en la Final de Campeones |
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