“Me ha parecido que tiene muchas sombras y algunas luces porque es un Dépor muy irregular”, afirma el exjugador blanquiazul Carlos Brizzola sobre la primera vuelta protagonizada por el equipo coruñés, una vez que la Segunda División alcanzó el ecuador el pasado domingo, aunque los herculinos tienen pendiente el partido aplazado frente al Tenerife en terreno canario.
Las palabras del argentino coinciden con las de los también exfutbolistas del Dépor José Ramón y Paco Liaño, así como con el análisis del técnico José Ángel Salgado ‘Peli’. Los cuatro califican con un aprobado raspado el papel de los blanquiazules hasta ahora.
“Habría que hablar un poco de lo que fue la continuidad del entrenador que ascendió al equipo y que no sé por qué motivo, si de confección de plantilla, de lesiones o lo que sea, convirtió a un equipo que en la segunda vuelta de la temporada pasada arrollaba en uno que fue casi un desbarajuste en muchos partidos por la cantidad de jugadores que no jugaban en sus puestos. Luego vino el cambio de entrenador, se atisba una mejoría, pero el equipo sigue siendo muy irregular”, alega Brizzola.
Los motivos expuestos por el exdelantero llevan a calificar la primera vuelta del cuadro deportivista con un “aprobado raspado”.
Una nota similar pone Liaño, quien tampoco está demasiado contento con lo visto hasta ahora.
“Le daría un aprobado justito, un cinco, no más, porque el equipo no acaba de darme la sensación de que tenga un juego o unas capacidades suficientes más que para aspirar a salvarnos”, indica.
En la misma línea se mueve Peli, quien valora los primeros 20 encuentros del cuadro herculino con un 5. “Obviando algún aspecto futbolístico”, apunta el entrenador, quien incluso sería más duro con un análisis más pormenorizado.
Más generoso se muestra José Ramón: “Un aprobado. Un 6 o un 7 porque creo que el Dépor está haciendo más o menos bien las cosas, pero aún tiene que mejorar para estar más arriba y dar otra sensación de poder jugar el playoff. Porque las sensaciones son más o menos buenas, pero no para verle arriba”.
A la hora de subrayar los aspectos fuertes de este Dépor, los expertos lo tienen bastante claro. Dos nombres sobresalen por encima del resto, los canteranos Mella y Yeremay, así como el tercer integrante de ese tridente desequilibrante en la mediapunta, Lucas.
“Lo que más me gusta son los jugadores que más destacan arriba, el ataque que tiene, pero a nivel individual porque colectivamente el equipo solo funciona cuando el partido se abre mucho y los rivales dejan jugar porque el equipo arriba lo tiene todo, velocidad, calidad, desequilibrio, pero el problema es cuando los adversarios se cierran atrás, se juntan. Y cuando el equipo contrario toca y está junto con balón, tiene ciertos problemas. Debe trabajar mucho en ese aspecto”, comenta José Ramón.
Brizzola lo tiene bastante claro también. “Lo más positivo es el despertar de Yeremay y Mella, es una constante de los que opinamos que cuando ellos están enchufados, el equipo tiene otra dimensión y cuando, por las circunstancias que sean, no están, el equipo no crea situaciones de gol y es incapaz de superar líneas contrarias en uno contra uno en otras partes del campo que no sean las dos bandas. Eso es un hándicap que va a tener durante toda la temporada”.
La opinión de Paco Liaño tampoco difiere de la de sus compañeros.
“Lo que más me gusta es que tenemos aquello que los demás equipos ansían, que es unos jugadores en el apartado ofensivo que le dan al equipo un nivel superior. Por otro lado, eso viene muy frenado y restringido, incluso en la participación de estos jugadores porque al equipo le cuesta mucho defender y generar fútbol cuando recupera la pelota y eso le está lastrando muchísimo”, expone el ganador del premio Zamora al portero menos goleado de la Liga con el Depor en las temporadas 1992-93 y 93-94,
El nombre del tridente también sale de los labios de Peli cuando se refiere a lo que más le ha convencido hasta ahora.
“Destacaría, sobre todo en la etapa de Idiakez y después en ciertos partidos de Óscar, ese camino que parece que se encontró con la velocidad de Mella, Yeremay y Lucas. En ese contexto puede ser muy superior a los rivales, pero no lo vimos con cierta regularidad. También me gustó, al margen de Mella y Yeremay, que son una realidad, la opción de cuando se optó por Barcia, cuando Pablo Martínez no estaba bien, que demostró que puede ser un central que dé cierta seguridad y como un recurso muy bueno a la hora de gestionar el balón desde la zona de centrales”, argumenta el entrenador.
Mientras el tridente se lleva todos los elogios, más dudas existen a la hora de valorar otros aspectos.
“No me satisface la poca capacidad del equipo cuando tiene que ser protagonista a través del balón y de un ataque más organizado y posicional. Y la poca seguridad defensiva que muestra en muchos partidos, así como la falta de gol de una manera más personalizada en un delantero que pueda ser capaz de marcar las diferencias en las ocasiones que se generan”, lamenta Peli.
Liaño pone el foco en la falta de creación de la medular, que considera que lastra demasiado a los coruñeses.
“El equipo está limitado porque no tiene un centro del campo capaz de generar fútbol”, dice el exguardameta.
A Brizzola le preocupan “las deficiencias defensivas en general, en todas las líneas, que se traducen en inseguridad defensiva en la propia área. Al equipo le falta trabajo defensivo. Además, tiene falta de gol y eso no sé si se debe a la planificación deportiva”.
José Ramón, por su parte, subraya que “hay muchos detalles a nivel colectivo en defensa y en ataque que impiden al Deportivo dar un golpe en la mesa y estar más arriba en la clasificación”.
“No veo mucha diferencia” es la idea más extendida al comparar el Dépor de Idiakez y el de Gilsanz.
“Más o menos es lo que venía haciendo ya Idiakez porque no hay muchas variaciones en cuanto a jugadores ni en cuanto a planteamiento de partido”, indica José Ramón.
Brizzola apunta que “con Gilsanz, por momentos, se ha notado que el equipo está más organizado defensivamente”.
“Idiakez planteaba partidos buscando más a los rivales en el inicio del juego y Óscar es menos ambicioso. Ha retrasado la línea defensiva quince metros”, resalta Liaño.
Para Peli, “el Dépor ahora es capaz de tener una organización defensiva más palpable que antes”.
Tres posiciones se repiten bastante entre los expertos cuando se les pregunta por las necesidades del Deportivo en el mercado de fichajes que arranca el 1 de enero. Un ‘9’, que es bastante obvio, un central y un jugador que mande en la medular.
“Ficharía un mediocentro que tenga equilibrio, que haga de unión un poco entre la defensa y el ataque, que mande un poquito más, que sea más contundente y organice el juego”, asegura José Ramón.
Para el excapitán blanquiazul y actual entrenador es fundamental “un mediocentro que maneje, tenga el control de la situación y haga jugar a los compañeros. Que se juegue a lo que él dice. Por poner un ejemplo, aunque ya sé que es imposible porque es el mejor del mundo en su posición, pero para señalar el perfil, un futbolista como Rodri, el del Manchester City.
Otro integrante del SuperDépor como Paco Liaño coincide con su excompañero.
“Soy partidario de traer, sobre todo, un mediocentro que dé jerarquía en el mediocampo, pero no solo a la hora de defender, sino que también tenga la capacidad de generar fútbol porque nos cuesta robar el balón al rival. Creo que si el equipo fuera capaz de tener más el balón y de sobrepasar las primeras líneas de presión de los rivales, aparecerían más nuestros jugadores desequilibrantes como Mella, Yeremay y Lucas, y Barbero sería más efectivo de lo que ha sido hasta ahora”, señala el exguardameta, quien también ve necesario “un defensa contundente, que no tenemos. Creo que iba a hacer crecer al equipo desde atrás hacia delante”.
Para Brizzola es clave incorporar un ‘9’.
“El trabajo de Barbero es encomiable y se le ha visto en los últimos partidos muy activo en pelear con las defensas rivales, pero tiene que haber otro que le coma los tobillos para jugar y meter goles, pero por lo que sea Bouldini no está, Cristian Herrera participa menos y no hay más. Ahí va a tener que reforzarse el equipo”, indica el argentino.
“Es fundamental el tronco central, un defensa central, un mediocentro y un delantero centro”, argumenta Peli.
“Necesitamos como el comer un mediocentro que sea capaz de generar situaciones de juego posicional y que a la vez tenga ese equilibrio defensivo. Por ejemplo, como Gorrotxategi, del Mirandés”, dice el técnico.
Para Peli también es clave fichar “un delantero que sea capaz de aportar definición con mayor calidad y solvencia, además de ese trabajo que da Barbero”.
“También se necesita un central que tenga la capacidad de juntar el equipo de atrás hacia delante y con autoridad en la defensa del área. Y después, un banda que dé esos minutos de descanso a Mella y Yeremay”, zanja.