La Navidad es una época ideal para retornar a casa, reencontrarse con la familia, los amigos y los orígenes. Uno de los que, como decía el famoso anuncio de turrón, vuelven a casa en estas fechas es Brais Suárez (A Coruña, 2003). Formado desde niño en el Deportivo, el portero coruñés ha hecho las maletas por primera vez para buscar minutos y crecer a nivel profesional. El Calahorra, equipo de la Segunda RFEF en el que juega cedido, le ha permitido madurar y sentirse protagonista, ya que se hizo con la titularidad durante diez jornadas, hasta que hace tres semanas tuvo que parar por una lesión muscular. Pero está listo para regresar a la competición a la vuelta de las vacaciones.
¿Cuándo llegó a A Coruña para pasar las fiestas?
El 23 por la noche, después de 10 horas de viaje, y ya pude estar con mis amigos, que tenía ganas de verlos. El 24 lo pasé con la familia, que también tenía ganas y muy bien. Fui en tren de Calahorra a Miranda de Ebro y, desde allí, a A Coruña, que son ocho horas seguidas.
Conozco bien ese tren, que lo he cogido muchas veces desde Logroño a A Coruña, con parada en Miranda.
Sí, allí pierdes una hora esperando.
Será una Navidad especial, tras haber salido de casa por primera vez.
Es cierto que los gallegos tenemos un poco de morriña porque estás fuera de casa, de la tierra, pero cuando me fui cedido tenía muy claro cuál era mi objetivo, que era ir a trabajar. En la vida hay mejores y peores momentos, fui muy decidido, y ahora, al regresar, tengo más ganas de ver a todo el mundo y estoy muy feliz y pasándolo bien.
¿Ha caído algún regalo?
De momento no, que vamos a esperar hasta Reyes. Caerá un poco de ropa, lo normal, pero será para el día 6 de enero.
Lleva toda la vida en A Coruña y en el Dépor. ¿Qué tal la experiencia de irse?
Hasta yo me he sorprendido de lo bien que lo estoy llevando. Es la primera vez que salgo de casa, compañeros nuevos, no conozco absolutamente nada, pero he caído bastante bien en el vestuario y tengo una relación especial con ellos. Calahorra está bastante bien, aunque es una ciudad pequeña y se me hace extraño porque estoy acostumbrado a A Coruña, pero estoy tranquilo, trabajando, siendo responsable conmigo mismo a la hora de alimentarme bien, cuidarme, ir al gimnasio... Tenemos un equipazo, aunque de momento los resultados hayan sido más irregulares, pero estoy seguro de que al final de temporada lograremos el objetivo, que es el ascenso a Primera RFEF.
¿Le gusta La Rioja?
No he podido ver mucho. Algún compañero es de Logroño y, a veces, vamos a dar una vuelta por allí, pero tampoco visitamos mucho. Fuimos un día a Haro a la bodega de un amigo de un compañero, pero no hay tiempo para conocer mucho.
No muy lejos de Calahorra está Mario Nájera, que juega cedido en la UD Logroñés. ¿Ha quedado alguna vez con él o le ha pedido consejo, ya que él es de allí?
Ha dicho que le avise cuando quiera, que está en Logroño, y yo encantado porque le tengo mucho aprecio y he estado jugando con él desde juvenil. Imagino que ahora estará en A Coruña, así que casi nos veremos aquí (risas).
Ha tenido mucha presencia en el Calahorra, aunque estas últimas semanas se ha visto obligado a parar por lesión.
Sí, empecé siendo suplente, que fue una decisión del míster y hay que respetarla. Yo seguí currando, haciendo buenos entrenamientos y cuando me dio la oportunidad de saltar al campo, me salieron bastante bien los partidos y llegaron victorias del equipo, pero en la jornada 14, contra el Tudelano, sufrí una microrrotura en el cuádriceps y me he perdido los tres últimos partidos. Me han dicho que a la vuelta de las Navidades voy a poder entrenar normal con el grupo.
Tras su lesión ficharon al ghanés Rakaz Brimah, de 37 años.
Es súper majo, se ha adaptado muy bien y es un compañero más, siempre desde su posición, pero lo importante es que yo me esfuerce, luego que sea el míster quien decida.
Aquí estoy mejorando mentalmente y madurando como futbolista; está siendo una pasada
¿Qué le está gustando más de la experiencia?
A lo que doy más valor es a que estoy madurando como futbolista. Llevaba toda la vida en el Dépor y allí era el veterano, entre comillas, tenía esos días de no estar tan fuerte mentalmente o de contestar a algún compañero del Fabril porque sentía que era la persona que más llevaba en el vestuario. Pero en el Calahorra me he encontrado con un equipo nuevo y de veteranos, donde soy el cuarto o quinto más joven, con gente adulta, entonces ahora tengo que aguantarme las ganas de hacer cosas que hacía antes y afronto cada entrenamiento como si fuera el último. Estoy mejorando mentalmente y madurando futbolísticamente. Está siendo una pasada.
¿Qué le pide a 2025?
Me va a tocar estar en dos equipos diferentes y si las cosas van según lo previsto, la primera parte del año va a ser con el Calahorra, que estoy seguro de que nos vamos a meter en el playoff y lograr el ascenso. La segunda parte es la vuelta al Deportivo, que aún la veo un poco más lejos.
Sigue mucho los encuentros de la escuadra deportivista desde allí?
Sí. De hecho, mis compañeros del Calahorra me putean un poco porque siempre intento seguir los partidos. Cuando voy en el bus del equipo y mete un gol el Dépor, lo celebro y vacilo a todo el mundo, o cuando le meten un gol, bufo y me vacilan porque saben que me fastidia mucho que pierda el Deportivo. También sigo al Fabril todo lo que puedo.
Veo al Depor de Óscar más compacto y sabe a lo que tiene que jugar
¿Le convence la primera vuelta que ha realizado el conjunto coruñés?
Estoy bastante contento porque sí es cierto que ha habido mejores y peores momentos, pero en general ha sido una primera vuelta bastante aceptable. Somos un equipo que acaba de ascender y evidentemente en Segunda División no ibas a ganar tantos partidos como en la Primera RFEF. Ahora el Dépor ha encontrado una buena dinámica y está haciendo buenos partidos. Creo que Óscar es un entrenador que se adapta a la plantilla que tiene, le está sacando todo el jugo y creo que, a partir de ahora, van a ir hacia arriba.
¿Qué es lo que más le gusta del equipo blanquiazul?
Hay dos Dépor un poco diferentes, el de Imanol y el de Óscar. Al de Óscar le veo un equipo más compacto, que es bastante sólido atrás. Aunque hay cosas que mejorar, le veo muy estructurado, que sabe a lo que tiene que jugar. Un equipo organizado y eso se está viendo reflejado, porque el jugador se siente cómodo. Cuando hay que tocar la pelota, la tocan, cuando es el momento del contraataque, contraatacan. Saben cuándo hay que ir a presionar y todo eso se ve reflejado y le están yendo las cosas bien al Deportivo.
Había gente que dudaba de si Mella y Yeremay triunfarían en Segunda y han callado muchas bocas
¿Le soprendió la decisión del club de subir a Gilsanz al primer equipo?
Creo que sorprendió que le eligieran, pero todo el mundo se alegró un montón. Siempre que se habla de canteranos se refieren a jugadores, pero que apostaran por un entrenador de la casa me hizo ilusión. Le conozco, sé de lo que es capaz y así está siendo. Lleva buenos resultados, da tranquilidad y sabes que el Deportivo va a conseguir grandes cosas con él. Ahora hay que esperar que siga sacando jugo, pero creo que en el poco tiempo que lleva ha hecho un trabajo bastante bueno.
¿Qué le parece lo bien que se han adaptado Mella y Yeremay al fútbol profesional?
Tanto Mella como Peke sobresalían del resto desde que llegaron a Abegondo. Si le das esa oportunidad a un jugador como ellos, que son chavales centrados y con calidad, ya ves cómo sorprendieron a todos haciendo esos partidazos en Primera RFEF. Después, había gente que dudaba de si triunfarían en Segunda y han callado muchas bocas demostrando la calidad que tienen y que también pueden triunfar en Segunda División. Están ayudando al equipo a conseguir muchos puntos.
Barcia también se consolidó en el once nada más jugar, aunque lleva varias semanas parado por lesión.
A Barcia lo conozco desde que llegué al Deportivo, al Benjamín B. Llevamos toda la vida juntos y es el mejor central que he tenido en mi vida. Un gran amigo y si me hizo ilusión que Peke y Mella fueran al primer equipo, lo de Barcia ya fue la leche. Con la responsabilidad que tiene la posición de central, en cuanto se ha notado cómodo, se ha visto el potencial que tiene y ha demostrado que puede jugar ahí.
¿Con qué se queda de cada uno de ellos?
De Yeremay ya sé que todo el mundo va a destacar su calidad, pero me quedaría con la tranquilidad con la que afronta los partidos. He vivido situaciones con él que ves a la gente nerviosa y Peke está como si jugara en el parque. Se va a atrever a cualquier cosa. Tiene tanta confianza en sí mismo, que se ve reflejada en su juego. De Mella ensalzaría esa frialdad a la hora de estar en el campo y que sabe explotar sus virtudes, esa velocidad que tiene, juega por las bandas más que por dentro porque sabe que es muy rápido. Con Barcia me quedo con esa seguridad y confianza en sí mismo de poder darlo todo en los entrenamientos todos los días. Aunque cometa un error, no le hace irse del partido. Cuando juegas con él, te transmite esa seguridad.
Helton ha conseguido darle puntos al equipo, que en un portero es súper importante y genera bastante confianza
Helton Leite se ha consolidado en la portería blanquiazul. ¿Qué le parece?
Era un portero que no conocía, es cierto que ya de primeras impresiona porque tiene bastante envergadura, pero buscando un poco más a fondo sobre su trayectoria, ya tenía recorrido, ha estado en grandes equipos y eso te da seguridad. En los partidos que he visto, me ha sorprendido, ha hecho grandes actuaciones y ha conseguido darle puntos al equipo, que en un portero es súper importante y genera bastante confianza. Tengo claro que da ese nivel porque tiene cualidades, pero también sé que en el día a día se tiene que esforzar al máximo porque hay dos grandes porteros como Germán y Eric, que con ellos sí que he tenido la oportunidad de entrenar y sé de su potencial. Ahora lo está haciendo Helton bastante bien y le están dando esa confianza y esa continuidad, pero en caso de que tuviesen que jugar tanto Germán como Eric, tengo la certeza de que iban a hacer un papel igual al que está haciendo Helton.
El Dépor cierra 2024 con tres puntos de ventaja sobre el descenso. ¿Dónde le ve en la segunda vuelta?
En el playoff, mínimo. Lo tengo clarísimo. Mis compañeros, a veces, me vacilan y me dicen que sea realista, pero el Deportivo tiene la capacidad de hacer frente a cualquier rival de la categoría. Si van las cosas normal, ya no te digo bien, va a meterse en el playoff.