Una temporada después de haber puesto punto y final a su etapa en el fútbol japonés, Miguel Ángel Lotina reflexiona a medio camino entre Bilbao y Logroño acerca de su porvenir profesional.

Este reposo en su dilatada carrera en los banquillos le está permitiendo empaparse de fútbol antes de emprender una nueva aventura.

Entrenador sin representante en España, aguarda su retorno a las pizarras mientras observa las evoluciones de un club que ha marcado su trayectoria como el RC Deportivo, en donde militó cuatro campañas (2007-11).

¿Cómo te va la vida?
Bien, con tranquilidad. Llevo un año fuera del fútbol como entrenador, haciendo cosas que tenía ganas de hacer. Llevaba ocho años entre experiencias diversas como Qatar o Japón. Siempre hay cosas que hacer, poniéndome al día. Paso temporadas en Bilbao y otras en Logroño, voy cambiando de ciudad, visitando a mis hijos.

Ahora seguro que te da más tiempo a ver más fútbol...
Pues sí, siempre fui una persona que disfrutó viendo este deporte, me gusta verlo en directo. Por ejemplo nunca he visto repetido el título de Copa que conseguí con el Espanyol. Veo cualquier partido, ya sea de Sudamérica o de Segunda B.

¿Cómo te fue en Japón?
Muy bien, me trataron fenomenal, a mí y a todo el mundo que llegue con ganas de trabajar. Son muy educados y respetuosos. Nos llevan cierta ventaja respecto a los europeos.

¿Cómo llevabas la cultura, el idioma, la comida...?
El idioma, con intérprete, poca gente habla inglés. La comida era de diez porque son muy limpios y pulcros. En cualquier restaurante hay máxima higiene. Son muy agradecidos, aunque no compres nada en una tienda te dan las gracias antes y después de entrar. Te atienden siempre con una sonrisa.

A diferencia de lo que se pudiese pensar en un primer momento, el fútbol es exigente también allí...
Sí, por supuesto, hay cosas diferentes como que por ejemplo te aplaude el visitante al llegar al campo. Si pierdes en casa pero peleas mucho te aplauden también. Hay muchísimo jugador que proviene de las universidades, de competiciones muy fuertes. Cada año hay muchos jugadores nuevos y competitivos. El deporte rey allí es el beisbol pero existen muchas fichas de futbolistas. Son muy de entrenar y mejorar, repetitivos hasta la saciedad.

¿Cómo es entrenar a Iniesta?
Bien, llevábamos a cabo entrenamientos a los que él estaba acostumbrado en el Barcelona, de mucha posesión. Cuando dejé España cambié un poco la filosofía del fútbol en el extranjero para exportar posesión, posición y más toque. Fiché a un colaborador del Barça para que fuese mi ayudante y este tipo de ensayos le gustaban.

¿Fue el mejor jugador al que entrenaste en tu carrera?
Siempre digo que entrené a muy buenos jugadores, depende del momento de cada jugador. Si ves la historia de cada uno, Iniesta es evidentemente el mejor al que entrené pero cuando lo tuve tenía 38 años. A Valerón lo entrené después de una lesión grave de rodilla. Filipe Luis también era buenísimo y también se lesionó. Tuve a Mostovoi, Javi Moreno, Coloccini o Iván de la Peña.

¿Tienes ganas de volver a entrenar en España?
No veo muchas posibilidades porque no tengo representante en España, solo en el extranjero. Antes de irme a Japón tenía ofertas pero estaba obsesionado con irme al extranjero. Si llega alguna propuesta está claro que la estudiaría antes de decidirme.

¿Qué recuerdos guardas de un Depor en el que milistaste cuatro cursos y al que supongo que te dolerá ver en Primera RFEF?
Bueno, fueron cuatro años maravillosos, siempre digo que me sobró el último día, el partido contra el Valencia. El Deportivo ya estaba bajando con sus problemas económicos pero seguía siendo un club muy bueno, con recursos, buenos jugadores y una afición sensacional. Me llevaba muy bien con el presidente Lendoiro, para mí fue un presidente maravilloso. Me dejaba trabajar y me apoyaba siempre.

Muchos nos acordamos de una frase tuya en Abegondo en la que incidías en que debíamos celebrar la permanencia en Primera porque el mundo del fútbol daba muchas vueltas...
La afición son personas y las personas pensamos que lo bueno va a durar siempre, le pasa a todas las aficiones. Viví algo similar en el Numancia, que ahora está en Segunda Federación. Si coges a un equipo que nunca ha estado en Primera todo va a ser positivo pero lo que ha vivido el Deportivo ha sido mucho.

El Deportivo vive su peor momento histórico, el cuarto año consecutivo en la categoría de bronce.
Claro, no solo por historia sino sobre todo por la afición que lleva el Depor que es muy numerosa. Me da pena la gente. Le achaco al fútbol español que las televisiones ha convertido a pequeños en clubes grandes y ha perjudicado a otros de ciudades más potentes como A Coruña que se han quedado fuera.

¿Qué se está haciendo mal en el Deportivo para unos resultados tan mediocres?
No lo sé, el año en Segunda tuvo muy mala suerte por el tema del Covid, no pudo competir contra el Fuenlabrada... El año pasado en el playoff contra el Albacete fue una pena porque era en casa y estaba muy parejo y este año me ha sorprendido la eliminación contra el Castellón porque creo firmemente que el Deportivo era mejor equipo. Cuando nosotros nos manteníamos en Primera División muchas veces no se valoraba.

La pasada semana la afición del Deportivo se ha echado a la calle para protestar contra la propiedad.
No me gusta hablar demasiado desde la distancia pero el Deportivo le debe mucho a Abanca porque de no haber estado ahí quién sabe dónde estaría. Por ejemplo, el Logroñés donde estuvo yo desapareció. El Depor está atravesando unos años muy jodidos pero volverá seguro.

¿Tienes miedo de que parte de los más de 25.000 abonados del club se desenganchen?
Creo que no, va a haber menos socios cuando el Deportivo suba a Primera (se ríe). Dice mucho del carácter de las personas, en pocos sitios hay tanta gente que se sienta orgullosa de su equipo como en A Coruña.

¿Cuándo te veremos por la ciudad?
Tengo que ir porque ya hace tiempo que no estoy; me gustaría ver a Lendoiro, a los directivos, a Suso Méndez, a los amigos. 

Elogios a Idiakez, Lucas Pérez y Álex Bergantiños

¿Qué opinión guardas de Imanol Idiakez?
Tengo buenas referencias, me han hablado muy bien de él. Comentarios de entrenadores que lo valoran como un gran profesional. Lo importante es tener una filosofía.

El Deportivo añora un técnico como Irureta, con siete años en el club, o tú mismo, con cuatro, en una época de baile de entrenadores constante en Riazor...
El objetivo único del Depor es ascender, cualquier otra cosa no vale. Es difícil cumplir estos objetivos y mantener a técnicos. Lendoiro lo vivió bien lo de las transiciones, perdiendo potencial de manera paulatina pero con cabeza.

¿Existe demasiada presión en el entorno?
La presión viene por la historia que tiene detrás, ya le gustaría a otros clubes disponer de esta misma presión porque significaría que detrás tienen una historia gloriosa.

¿Te sorprendió el regreso de Lucas Pérez?
Pues sí porque estaba jugando en Primera en el Cádiz, con bastante protagonismo, e ir a Primera Federación tiene mucho mérito, aunque sea a un grande como el Depor. Detrás de ello seguro que hay un gran cariño por la entidad.

Álex Bergantiños se retira...
Cualquier futbolista profesional en Europa con 8-10 años me quito el sombrero, imagínate con Bergantiños con 19 años ahí dando el callo. Es un jugador que, después del ‘Superdepor’, es el jugador más relevante del Deportivo.