“El Granada es una buena prueba para ver dónde estamos”, avisó Imanol Idiakez ante la visita al Nuevo Los Cármenes, donde al Dépor le espera uno de los peces gordos de Segunda División, un recién descendido con el único objetivo posible del regreso a Primera.

Casi la totalidad de la plantilla rojiblanca ha competido en la élite, aunque los compromisos de las selecciones nacionales dejan al técnico Guille Abascal sin tres titulares para el duelo de esta tarde, el centrocampista camerunés Martin Hongla, el extremo georgiano Giorgi Tsitashvili y el delantero albanés Myrto Uzuni. Aun así, el preparador de la escuadra nazarí cuenta con futbolistas experimentados y con mucho nombre, como Lucas Boyé, Manu Trigueros, el israelí Weissman, Gonzalo Villar, Ricard, Luca Zidane o el arzuán y exblanquiazul Pablo Insua, quien podría sentarse en el banquillo por primera vez desde el arranque de curso, tras haber sido titular en las tres primeras jornadas.

Un rival dominador

La clara apuesta ofensiva del Granada —equipo al que le gusta vivir en campo contrario y dominar a través del balón y que es el segundo que más remates efectúa— genera dudas sobre si Imanol Idiakez mantendrá el once que la pasada jornada se impuso al Racing de Ferrol en Riazor o, por el contrario, introducirá cambios para reforzar el equipo atrás.

El lateral izquierdo es la demarcación que más incertidumbre transmite. Tras alinear a Ximo a banda cambiada en las dos primeras jornadas, el entrenador del Deportivo probó la pasada semana con Mella. El extremo de Teo no desentonó, sobre todo en la segunda parte, pero se notaron ciertas limitaciones obvias en defensa por su condición de extremo natural y quedó claro el desperdicio que supone jugar con la joven perla blanquiazul tan lejos del área contraria.

Con este escenario y ante el duelo con un rival que llega tan fácil a campo contrario, parece difícil que Idiakez vaya a repetir con Mella en el lateral zurdo y se abre la posibilidad de que Ximo ocupe dicha demarcación de nuevo y Petxarroman juegue por la derecha —pero el vasco no ofreció demasiada seguridad en las dos primeras jornadas— o que el lateral granadino juegue en su posición natural, la derecha, y que Obrador estrene titularidad por la banda contraria.

También existen dudas sobre si Idiakez podría reforzar la medular con Mfulu, junto a Villares y José Ángel. Y la tercera variante apunta al ataque, con el retorno de Lucas Pérez a la demarcación de ‘9’ y Mario Soriano en la mediapunta. Un movimiento que permitiría al preparador blanquiazul mantener en el campo también a Yeremay y a Mella, ocupando los extremos.

Reforzados

La victoria del pasado domingo sobre el Racing de Ferrol otorga oxígeno al Dépor de cara a su visita a Granada.

“Será un bonito reto ir a Los Cármenes, mirarles a los ojos y ver hasta dónde llegamos”, aseguró Idiakez, que se muestra valiente ante un conjunto que pese a la tremenda plantilla que atesora, ha arrancado la temporada de manera irregular. De momento, el conjunto nazarí ha perdido los dos partidos que ha disputado en su campo esta temporada, ya que abrió el curso con un 1-2 ante el Albacete y la pasada semana encajó un duro 1-3 a manos del Huesca.

Idiakez, que sólo cuenta con la baja de Sergio Escudero, que se recupera de una luxación en el codo izquierdo, se ha llevado a Granada a los últimos fichajes, Cristian Herrera y Juan Gauto, que han entrado en su primera convocatoria. De hecho, el técnico destacó el buen estado físico del delantero.

Arropados por 500 deportivistas en las gradas

Los más de 1.000 kilómetros que separan A Coruña de Granada no suponen un obstáculo para los aficionados del Deportivo, que una vez más vuelven a sorprender por su apoyo incondicional al equipo blanquiazul. 500 seguidores estarán animando a su equipo en el Nuevo Los Cármenes.  Idiakez dijo ayer que no le sorprende, ya que, según afirmó, “la afición del Deportivo es de otro nivel”.