Óscar Gilsanz valoró este viernes, en rueda de prensa, el partido que su equipo disputará el domingo en Almería.

Estado de la plantilla:

"Los jugadores que estaban lesionados, Ximo, Jaime, Mfulu y José Ángel siguen no estando disponibles. Nuke es el que más cerca está, ya hizo parte de las sesiones con  nosotros durante la semana, y luego Mella y Lucas tienen ciertas molestias, pero estamos tratando de recuperarlos para ver si llegan al partido del domingo, pero de momento estamos cuidándolos para ver si pueden llegar".

Porcentaje para ver a Mella y Lucas en Almería:

“No me atrevería porque no suelo jugar a adivino, casi nunca”.

José Ángel:
"Está llevando un tratamiento para ver si remite esa dolencia en el pubis, tratando de que remita ese dolor para poder valorar más adelante el alcance de la lesión y los pasos a seguir".

Mfulu:
"Sí, lo que hizo fue completar parte de las sesiones, no hizo sesiones completas, con lo cual, en principio, sigue siendo baja".

Opciones en la plantilla, con las dudas de Mella y Lucas y la baja de Yeremay:
"Cuando hay alguna baja por el motivo que sea, siempre es una oportunidad para que la fuerza del equipo saque lo mejor que tiene. Es un buen momento para que el colectivo emerja y que se haga un buen partido, de la misma manera. No valoramos mucho antes de tomar las decisiones, en cuanto a si están para muchos minutos o para pocos, porque creemos que cuando los jugadores no están al cien por cien, son sensaciones en el momento que se valorarán, pero creo que tenemos jugadores para jugar, para salir de inicio, jugadores que están teniendo menos minutos de los que merecen, seguramente, por el día a día que están haciendo, pero siempre que hay bajas, es un buen momento para que otros futbolistas levanten la mano".

Sensaciones de Mella y Lucas:
"Los jugadores quieren llegar, quieren jugar y van a hacer todo lo posible para poder estar, tanto en su tratamiento, en su recuperación, como en las sensaciones que tienen. Ellos piensan que sí, el jugador siempre cree que puede llegar y valoraremos mañana en el entrenamiento".

¿Cómo afronta el partido ante un equipo con facilidad para marcar?
"Todos los rivales nos hacen pensar a los entrenadores durante la semana. El Almería también, es un rival que todos conocemos, que viene de Primera División, con futbolistas de mucho nivel para la categoría, uno de los equipos, junto con nosotros, que más disparos a puerta realiza, con lo que tiene un bagaje ofensivo importante. Teniendo en cuenta esas cualidades del rival y, sobre todo, tratando de estar nosotros bien, que es lo más importante siempre, que nosotros estemos bien y nos encontremos con confianza en el partido, que seamos capaces de oponernos al rival. Es un rival importante, pero tenemos que poner la atención en nosotros y en lo bien que podemos estar".

Posible cambio de dibujo o no, si se confirman las bajas de Mella y Lucas:
"Ambas cosas. Hay otros jugadores que creo que están preparados para jugar y después, el dibujo siempre lo replanteas, porque el rival tiene ciertas características, ciertos lugares del campo donde te puede crear más o menos peligro, pero eso pasa en cada partido. Muchas veces, aunque la distribución del equipo es similar, las funciones dentro del campo no siempre son las mismas y en estos dos partidos que llevo aquí no todos los jugadores tuvieron la misma posición en el campo, independientemente de que salgan en la misma foto inicial. Creo que tenemos un equipo en el que los jugadores son capaces de adaptarse a diferentes roles dentro de la propia estructura del equipo, pero siempre los rivales te hacen replantearte todo, la altura a la que te interesa defender, la estructura, todo".

¿Qué matices o cambios ve en su Dépor con respecto al de Idiakez?
"No voy a hablar directamente de los cambios o no porque podemos entrar en valoraciones que realmente no... Simplemente que nosotros tratamos de aprovechar el bagaje ofensivo que tiene este equipo, que siempre lo tuvo, ser capaces de darle ese equilibrio para que todas esas situaciones de llegadas al área, todas esas situaciones de gol, de juego ofensivo, darle un rendimiento para que se transformen en puntos, que es lo que todos los equipos del fútbol profesional buscamos. Que todo el caudal ofensivo que tienes, esté lo suficientemente equilibrado como para que eso se transforme en puntos".

Lo que resta para implantar ‘made in Óscar Gilsanz en el equipo:

“Nunca hay dos equipos iguales, ni en el juvenil con el Dépor ni en los equipos del mismo entrenador. Los entrenadores no somos los mismos cuando pasan tres o cuatro años, hay ciertas similitudes, pero mi objetivo no es que haya un Dépor ‘made in Óscar Gilsanz’, sino que mi equipo  controle las situaciones del partido, que compita, que sin perder las cosas que está teniendo en cuanto a competición y ritmo de juego, sin perder eso, que sea capaz de que el rival no te haga daño también. Es un objetivo que tenemos todos los entrenadores, hacerle el mayor daño posible al rival y que el rival no te haga daño. Ese equilibrio donde está siempre el fútbol”.

¿Clave ante un rival que presiona tan alto?
"Claves ante un rival que presiona tan alto y con tantas marcas individuales: “Depende del partido, porque el Almería no siempre aprieta alto del todo, aunque sí intenta de inicio hacer una presión alta, siempre que un equipo adelanta su línea defensiva, ese espacio a su espalda es un espacio a conquistar por el rival. Esa es muchas veces la dificultad de defender muy alto, que si el balón no está suficientemente apretado, es fácil dar un pase a la espalda y hay jugadores con velocidad para hacer ese tipo de desmarques, el rival le va a obligar a hacer muchos metros para atrás. Si el rival hace muchos metros para atrás y la línea defensiva sigue con la presión muy alta, las distancias se alargan mucho, hay mucho más espacio por dentro para jugar y así se hacen los equipos largos. Entonces, siempre intentas o bien llegar a los puntas un poco más atrás  o seguir manteniendo la línea alta. Es una cuestión que muchas veces depende tanto de la presión que haya sobre el balón como de los duelos defensivos que tú puedas tener con los rivales. Si los centrales son más lentos que los delanteros y se miden siempre a campo abierto por velocidad, vas a tener problemas, entonces vas a tener que insistir en la presión o venir unos metros para atrás. Al final, lo importante es que haya un equilibrio entre las dos cosas y que cualquier equipo, no solo el Almería, sea capaz de defender junto. Eso evidentemente es lo que trabajamos los entrenadores y seguramente Rubi también".

¿En este tiempo, ha disfrutado o sufrido?
“Es una conversación larga porque realmente a los entrenadores nos gusta esta vida que llevamos en el día a día. Todos queremos estar en esta situación, pero después el día a día te va haciendo que todos los problemas que se van solucionando, los lleves con normalidad. Siempre quieres alcanzar lo que te va a hacer feliz y al final, lo que te hace feliz es el día a día y yo trato de disfrutarlo. Entre la victoria por 1-5 en Cartagena y el 1-0 contra el Eibar, me quedo con el 1-0 porque creo que el equipo mostró más cosas que contra el Cartagena. Mostró una capacidad de sabe sufrir en momentos malos y responder y mejorar en situaciones de defensa de centros laterales, que prácticamente no nos remataron ninguno. El equipo tuvo momentos sin salir de atrás, porque el rival nos apretaba, respondiendo a esa situación. Creo que eso va a ser un aprendizaje para el futuro. Si somos capaces de competir y cada día somos un poco mejores, los entrenadores somos felices, más allá del sufrimiento del partido”.