La única vez que el Deportivo afrontó un partido de la temporada 2024-25 con todos sus efectivos disponibles fue durante la visita del Málaga a Riazor el pasado 6 de octubre. Una circunstancia que se mantendrá en este primer partido del año, debido a la sanción de Diego Villares, a pesar de que la enfermería blanquiazul se ha vaciado por primera vez desde aquel duelo con el cuadro malacitano.

David Mella sufrió una leve torcedura en un tobillo durante el entrenamiento del pasado martes, pero ayer completó la primera parte de la sesión con el grupo y posteriormente recibió tratamiento de fisioterapia para estar en condiciones de viajar a tierras malacitanas. Petxarroman, por su parte, se retiró antes que sus compañeros, pero desde el club apuntan a que se debió a un control de cargas de trabajo.

Minutos antes de que arrancara el entrenamiento en Abegondo, Ximo ya afirmaba que Mella “está bien”.
“Ayer tuvo un golpe, pero dijo que para hoy iba a estar y, en principio, saldrá a entrenar”, indicó el lateral derecho.

La noticia positiva se confirmó posteriormente, cuando el joven extremo de Teo saltó al césped para ejercitarse con el resto de la plantilla.

Tres meses después

Hacía tres meses que la enfemería no se vaciaba. Desde que Sergio Escudero, que sufrió una luxación en su codo izquierdo durante el amistoso de temporada frente al Chaves, entraba por primera vez en una convocatoria. Fue para el partido de la octava jornada contra el Málaga en Riazor.

Aquel fue el único encuentro en el que el técnico blanquiazul —Imanol Idiakez en ese momento— convocó a todos los integrantes del primer equipo.

Una semana después, el vasco perdió a Gauto y Yeremay para el desplazamiento a Elche. Y a partir de la décima jornada se sucedieron las lesiones en la medular, primero con los problemas de pubis de José Ángel y después con la lesión muscular que sufrió Mfulu en el bíceps femoral de su pierna derecha.

Más adelante cayeron Jaime y Dani Barcia. Este último, de baja desde la decimoquinta jornada, cuando se lesionó durante la visita a Almería. Pero el canterano se ha reintegrado a la dinámica de grupo tras el regreso de las vacaciones de Navidad y ya está listo para competir.

Con todos los integrantes en condiciones físicas, el lunar es la expulsión que sufrió Villares en el último choque de 2024, ante el Mirandés en Riazor (0-4), que impedirá al centrocampista jugar en Málaga.

Equipo tipo

La ausencia del futbolista vilalbés, sin embargo, no impedirá a Óscar Gilsanz alinear el que presumiblemente es el once tipo para este arranque de 2025. Quizá, la única duda pueda encontrarse en el lateral izquierdo, donde es más difícil resolver si en La Rosalesa jugará Sergio Escudero o Rafa Obrador. Aun así, en principio figura con más papeletas el veterano jugador vallisoletano, que fue titular en la goleada frente al Castellón (5-1) en Riazor en la penúltima cita de 2024, que el mallorquín, que jugó de inicio en el cierre de año ante el Mirandés.

La portería tiene dueño, Helton Leite, fijo bajo palos desde la tercera jornada. Además, el brasileño ha protagonizado varias acciones de mucho mérito en los últimos encuentros.

Tampoco ofrecen dudas el lateral derecho, donde Ximo se ha confirmado como una pieza fundamental, y la presencia de Pablo Vázquez en el eje de la retaguardia. El central de Gandía es el único de la plantilla que ha jugado de inicio en los 20 encuentros de Segunda División que ha disputado el Dépor y solo se ha perdido dos minutos, debido a que se retiró lesionado en los instantes finales del duelo con el Castellón.

Recuperación de Barcia

La recuperación de Barcia obliga a Gilsanz a tener que elegir a la hora de designar el compañero de Vázquez en el eje de la zaga. El canterano jugó diez partidos seguidos entre las jornadas sexta y decimoquinta, pero su lesión devolvió a Pablo Martínez a la titularidad y el francés ofreció un notable rendimiento, así que todo apunta a que el galo se mantendrá en el once este fin de semana.

Menos o ninguna incertidumbre ofrecen el resto de demarcaciones. La pareja Mfulu-Mario Soriano parece haberse asentado en la zona ancha, mientras que la mediapunta parece reservada para los tres futbolistas más desequilibrantes, Mella (siempre y cuando el de Teo se recupere bien de la torcedura en un tobillo), Lucas y Yeremay, y en el ataque es probable que Barbero enlace su décima titularidad seguida.

Aún quedan dos entrenamientos por delante antes de viajar a Málaga, pero de momento el once de La Rosaleda parece bastante perfilado.