La victoria es un objetivo obligatorio esta tarde en Riazor (19.00 horas) para que el Deportivo mantenga intactas sus aspiraciones a conseguir el ascenso directo. Para lograr dicho triunfo ante el Celta B, la escuadra coruñesa deberá frenar al equipo con el mejor registro de toda la Primera RFEF en las trece últimas jornadas de liga.

El filial celeste ha sufrido una sola derrota desde el pasado 7 de diciembre y ha sumado 32 de los últimos 39 puntos en juego.

En los trece últimos compromisos ligueros, el bloque dirigido por el técnico Claudio Giráldez ha obtenido seis puntos más que el Alcorcón, actual líder del campeonato y el segundo mejor equipo durante los tres últimos meses, y siete más que el Depor, tercera mejor escuadra del Grupo 1.

Reacción

El pasado 7 de diciembre, el Celta B perdía en Talavera (1-0). En aquel momento, el conjunto vigués estaba instalado en el undécimo puesto del grupo con 17 puntos, a nueve del Deportivo, que era quien ocupaba la última plaza del playoff de ascenso, y a 16 del liderato, que en ese instante estaba en manos del Córdoba.

Dicho tropiezo, que se producía tres días después de empatar en Balaídos frente al Algeciras (2-2), daba paso a una reacción que ha llevado al filial celtiña a registrar un balance de diez victorias, dos empates y una sola derrota en las trece últimas citas de la competición.

El Rayo Majadahonda, en el Cerro del Espino en la jornada 23 (1-0), ha sido el único equipo capaz de tumbar al rival de hoy del Depor durante este último tramo. Y fue gracias a un gol de Pelayo en el minuto 89.

Fuenlabrada (1-1) y San Fernando (2-2), además, conseguían arrancar un empate.

Pero los otros diez últimos oponentes han mordido el polvo ante el Celta B: Cultural (2-1), Unionistas (0-3), Racing (1-0), Linares (4-2), Córdoba (0-2), Pontevedra (1-0), Alcorcón (1-0), Mérida (0-3), Sanse (0-1) y Badajoz (2-0).