Alfredo Santaelena, ex jugador del Deportivo y héroe de la Copa del Rey conquistada por el conjunto coruñés en 1995, atiende a nuestro periódico con motivo del estreno de la liga 2023-2024 frente al Rayo Majadahonda, equipo al que entrenó la pasada temporada.

Arranca un nuevo curso y de momento estás sin equipo.
Sí. A pesar de que cogí al Rayo en la séptima jornada, en la que sólo llevaba un punto, y logramos la permanencia en una categoría muy difícil, que para mí fue un éxito, decidieron cambiar un poco la filosofía del club, metiendo a chavales jóvenes, bajando mucho el presupuesto y apostaron por otro perfil de entrenador. Desgraciadamente me toca empezar el curso fuera de los banquillos y a esperar una oportunidad.

El año pasado también empezaste sin equipo y después encontraste un banquillo.
Llevo entrenando desde 2001 y he tenido la suerte de entrenar todos los años, pero a uno le gusta coger un equipo de cero, empezar la pretemporada, porque luego te toca coger un proyecto ya hecho y es más difícil imprimir tu juego.

El técnico del Majadahonda es Carlos Cura, que el pasado curso dirigió al filial.
A ver si tiene suerte porque es una categoría muy exigente, no es la Tercera RFEF y tienes que estar preparado. Han mantenido una plantilla joven, el eje de la defensa. Han fichado jugadores como Francisco Reguera, que le tuve en el DUX Internacional, Raúl Tavares, del Cornellà, han subido a chavales del filial... Es una apuesta diferente, un equipo que apuesta fundamentalmente por la juventud, aunque mezcle con veteranía. Es una categoría muy exigente, que les puede salir bien o mal. A ver.

¿Qué tipo de técnico es?
Por lo que vi jugar el año pasado al filial, quiere tener un ataque organizado, con momentos de fútbol directo jugando al espacio con jugadores rápidos arriba. Es un entrenador joven, que el año pasado, a pesar de que estuvieron a punto de cesarlo, logró meter al equipo en el playoff de ascenso a Segunda RFEF, donde perdió en primera ronda con el Getafe B. Le gusta llevar la iniciativa, pero hay que ver qué tipo de jugadores tiene este año.

Carlos Cura quiere tener un ataque organizado, con momentos de fútbol directo

¿Qué te parece el Grupo 1?
Personalmente creo que es más flojo que el de la temporada pasada, sin desmerecer a ningún equipo. El Grupo 2, con los equipos andaluces, el Castilla y el Atlético B, creo que es más fuerte. El año pasado había un poco más de equilibrio, pero esta temporada, aunque están la Ponferradina y el Lugo, el Depor va a estar seguro arriba tiene que intentar ascender directo, porque es el objetivo.

¿Te gusta la plantilla?
Se mantienen jugadores importantes de la temporada pasada como Lucas, Mackay o Villares. Creo que han hecho una buena plantilla y tienen un buen entrenador. Lo que deseo es que el Deportivo desaparezca de la Primera RFEF ya esta temporada y ascienda, que no va a ser fácil porque la categoría es muy exigente.

¿La veteranía de los futbolistas que ha fichado el Depor, sobre todo en defensa, puede ser un plus para el ascenso?
La veteranía siempre es importante en ciertos puestos, manejar la parte de atrás, la defensa, que haya gente experimentada en esa columna vertebral que sostiene a un equipo. Han firmado ese tipo de jugador porque en un equipo como el Depor es fundamental saber manejar esa presión entre comillas, ser ganadores, ese perfil de futbolista que le va a dar esa experiencia al equipo y sabiendo equilibrarla con los chavales jóvenes.

El Grupo 1 es más flojo que el de la temporada pasada; El Depor va a estar seguro arriba

En ese sentido, dos jóvenes como Yeremay y David Mella han tenido un claro papel protagonista en pretemporada.
Es que el Deportivo está sacando chavales constantemente. Tienen jugadores jóvenes con mucha ilusión, que se sienten deportivistas y hay que saber manejarlo. Son chavales con un talento y una calidad individual y hay que ponerles y que se dejen llevar por la gente con más experiencia y por su entrenador. Yeremay es un jugador desequilibrante en el uno contra uno, tiene ese don, que hay que darle y ponerle en el campo. ¿Qué mejor para el deportivismo que los chicos jóvenes y canteranos que vengan al Fabril puedan crecer y debutar con el primer equipo?

El Depor ha jugado seis amistosos y sólo dos ante rivales de su liga. ¿Ha sido una pretemporada algo corta?
Cada entrenador tiene su manera de trabajar. Yo tampoco soy un técnico que me guste tener muchos partidos en pretemporada. Cinco semanas y media hacen una pretemporada perfecta para los jugadores, ahí meter cinco o seis partidos... Quizá los rivales, eso sí, quitando la Ponferradina, han sido de menos entidad, pero los entrenadores intentamos que los jugadores tengan minutos, rotarlos en pretemporada, que tengan buenas sensaciones y creo que es lo que ha intentado Imanol Idiakez. Aunque sí podían haber metido algún partido más.

¿Empezar la competición en Riazor es positivo?
Creo que sí, porque ya el año pasado su talón de Aquiles fueron los partidos a domicilio, mientras que en Riazor es un equipo fuerte. Ya tiene casi 23.000 socios, que apoyan al equipo donde sea y se desplazan donde sea. Es importante que Riazor sea un fortín porque es vital que no se escapen puntos de tu casa porque hay que ascender como campeones.

Mackay reconoció que estuvo a punto de colgar los guantes tras el partido en Castellón.
Yo estuve con Nando en Riazor viendo el partido de ida e igual que Mackay, que es un porterazo, no estuvo acertado en Castalia, en la ida hizo tres paradones impresionantes y salvó al equipo, pero todos nos quedamos con los errores en el partido de vuelta, que en un jugador con esa experiencia te sorprende un poco. Ha hecho lo correcto, él es un deportivista al 200% y se ha podido equivocar en ese partido, como nos equivocamos todos. Son momentos difíciles, porque él es un tío querido en A Coruña y se siente responsable y es una putada, pero ha hecho lo correcto, tiene carrete por delante y lo que tiene que hacer esta temporada es ponerse otra vez las pilas y ser lo buen portero que ha sido en campañas pasadas.