Deportivo y Celta han escrito desde aquel 9 de noviembre de 1924 una rivalidad eterna que consta de 237 capítulos. Tal es el número de partidos en los que se han enfrentado a lo largo de estos cien años. Para ambos, no hay rival más enconado. Ni más repetido.
Con 167 duelos de carácter oficial, el Celta es el rival al que más veces se ha enfrentado el Dépor y el Dépor es el rival al que más veces se ha enfrentado el Celta. La cifra crece hasta los 237 encuentros si sumamos los 70 partidos de carácter amistoso en los que se han visto las caras.
Blanquiazules y celestes se han medido en Primera, Segunda y Segunda División B. También lo han hecho en la Copa de España y en el desaparecido Campeonato de Galicia. Incluso se vieron las caras en varias y decisivas promociones. También en el Trofeo Teresa Herrera. Y en el Ciudad de Vigo. O en el Conde de Fenosa, el Concepción Arenal, el Rosalía de Castro y el Conde de Fontao.
Se han enfrentado por toda Galicia. En A Coruña, Vigo, Santiago, Ourense, Lugo, Ferrol, Vilagarcía de Arousa, Carballiño, Porriño, Padrón, Foz, Cedeira y Pontevedra. También jugaron en una ocasión en Madrid. E incluso al otro lado del Atlántico, en Montevideo.
La crisis deportivista de los últimos años nos ha dejado sin derbi durante más tiempo que nunca. Desde 2018 no confluyen unos caminos que se cruzaron sin interrupción todos los años durante su primer medio siglo de coexistencia. El primer año sin un derbi gallego fue 1974. Después, únicamente faltaron a la cita con O Noso Derbi 1988, 2009, 2010 y los últimos seis años.
El clásico del fútbol gallego ha servido para escribir páginas inolvidables y decisivas para ambos clubes. Como la promoción a partido único en Chamartín, en 1940, que dejó al Celta en Primera con un solitario gol de Nolete, el pichichi de los derbis. O el partido del chaparrón sobre Vigo en el que Helenio Herrera dejó helados a sus rivales, esperando sobre el césped, para salvar del descenso al Deportivo.
El derbi también ha servido para escribir puntos finales. El 12 de noviembre de 1939, los coruñeses ganaron 4-0 a los vigueses. Fue el último partido de la historia del Campeonato de Galicia. El clásico del fútbol gallego ha cerrado ascensos, como el del Dépor en 1964, e igualmente descensos, como el de los blanquiazules en 1970 y el del conjunto vigués en Riazor en 2004.
Los Dépor-Celta incluso fueron parte de torneos internacionales. En el verano de 1951, ambos protagonizaron el Torneo Luso-Galaico, un cuadrangular a doble vuelta frente al Oporto y al Sporting Braga. El equipo vigués se proclamó campeón.