David Mella fue el jugador más destacado de un Deportivo gris, sin frescura, ante el Mirandés. Los blanquiazules cosecharon una dura derrota 0-4 con la que cerrar el año 2024.
Helton Leite. Fusilado (5). El meta brasileño no tuvo la culpa de la abultada derrota. Seguro en el juego con los pies. Estuvo a punto de detener el penalti que abrió el marcador a Izeta. En la segunda parte los centrales le jugaron una mala pasada en los tantos. Evitó una goleada todavía mayor.
Ximo Navarro. Sin gasolina (3). El lateral derecho finalizó el duelo ante el Castellón con molestias y no estuvo a su mejor nivel este domingo. Atento al corte en los compases iniciales, fue perdiendo fuelle. No pudo hacer nada para evitar el 0-2 en un brillante remate de Joel Roca. No se incorporó apenas al ataque.
Pablo Vázquez. Impreciso (3). Duro en el corte en el juego aéreo desde el inicio de la contienda; en la jugada del 0-2 no estuvo afortunado, con un despeje de cabeza sin control que facilitó la jugada de peligro que originó la diana de Joel Roca. Quizá en la segunda parte pagó el sobreesfuerzo del pasado jueves.
Martínez. Desubicado (3). Comenzó sólido por alto, sin complicarse la existencia pero con más problemas en la distribución del balón. Poco a poco se fue diluyendo con el paso de los minutos. Una imprecisión suya en el pase estuvo a punto de costarle muy cara al equipo. Desaparecido en el 0-3 y en el 0-4.
Obrador. Blando (3). Intentó aportar calidad y profundidad por su carril izquierdo pero tuvo verdaderos problemas ante la agresividad de los atacantes jabatos. A pesar de todo se sacó de la manga un centro medido con la izquierda que a punto estuvo de poner en bandeja un tanto de cabeza a Lucas Pérez.
Mfulu. Desbordado (4). El franco-congoleño se vació como siempre en la contención, robando y entregando al primer toque en corto. La aglomeración de efectivos del Mirandés en la parcela ancha le obligó a un sobreesfuerzo en el marcaje. Visiblemente incapaz de frenar a sus pares, fue relevado en el minuto 56.
Soriano. Maniatado (3). Pasó bastante desapercibido en los primeros 45 minutos, en los que la consistencia del cuadro castellano anuló gran parte de su talento en la distribución. Mala suerte en la señalización de la pena máxima que abrió el partido, habida cuenta de que el balón impacta primero en su cuerpo.
Yeremay. Desdibujado (2). La calidad del canario fue frenada en seco por el ímpetu defensivo del Mirandés, con constantes ayudas ante los atacantes locales. Apenas dejó pinceladas de calidad sobre un terreno de juego mojado y un tanto pesado. Sus regates no dieron el fruto esperado y acabó el partido muy desdibujado.
Lucas Pérez. Desquiciado (2). Regresaba al equipo tras haber cumplido sanción frente al Castellón. No dio la sensación de encontrarse cómodo sobre el terreno de juego. En el primer acto gozó de un cabezazo a placer tras centro de Obrador que no atinó a embocar. Fruto de innumerables faltas, se le vio excesivamente protestón.
Barbero. Anulado (2). Su sacrificio por el equipo está fuera de toda duda pero en esta ocasión le costó generar peligro sobre el marco defendido por Raúl Fernández. Se dejó caer al centro del campo para recibir pero careció de verticalidad y ocasiones nítidas en el primer tiempo. Vio amarilla y fue sustituido.
EL MEJOR. Mella (5). Desparpajo solo a cuentagotas (5). Comenzó el duelo haciendo gala de su chispa habitual, desbordando y forzando una falta muy peligrosa al borde del área. Además, se le vio involucrado en tareas defensivas, ayudando a Ximo Navarro en el corte. Raúl Fernández le sacó un disparo cruzado tras un destacado eslálom en el primer acto, en el primer y único remate a puerta con veneno de los herculinos en los primeros 45 minutos. Muy acosado por sus rivales, no tuvo la libertad necesaria para explotar su vertiginoso cambio de ritmo. En la segunda parte su rendimiento decayó, al igual que el de todo el equipo, si bien dejó alguna pincelada aislada del desequilibrio que posee.
SUPLENTES:
Villares (2). Saltó para tapar vías de agua; expulsado por el VAR de manera rigurosa.
Bouldini (-). Apenas intervino en el juego; fue objeto de varias infracciones visitantes.
José Ángel (-). Entró a escena con el 0-4 con el objetivo de taponar la herida local.
Jaime (-). Trató de aportar consistencia a la medular en sus escasos minutos.
Gauto (-). También en inferioridad numérica y con el 0-4 intentó oxigenar al colectivo.