Paula Novo Saborido (Boiro, 13 de abril de 2005) puede tener como regalo de su diecinueve cumpleaños un ascenso. Cuenta con ficha del filial, pero está inmersa en la dinámica de entrenamientos del primer equipo, con quien debutó poco antes de cumplir 17 años. Su progresión iba por el camino correcto cuando una desafortunada lesión a principios de 2023 en el ligamento cruzado de su rodilla izquierda lo frenó todo. Se recuperó y ya está de nuevo a su mejor nivel, como muestra que Irene Ferreras ya ha confiado en ella para tener minutos e incluso ser titular. A lo largo de las próximas líneas habla de su camino y del futuro, que tras renovar hasta 2026 con opción a dos cursos más, solo siente en blanquiazul.
Imagino que tienes la ilusión de ir convocada el domingo.
Sí. Somos muchas jugadoras y me he esforzado durante toda la semana para ver si se da la oportunidad de ir convocada. Vivirlo desde dentro te puede hacer un poco más de ilusión, pero sino estaré allí con ellas y viviéndolo de la misma forma.
¿Cómo fueron tus inicios?
Recuerdo que empecé aproximadamente a los siete años. Mi padre desde que tengo recuerdo siempre estuvo entrenando equipos y mi hermano también jugaba. Muchas veces me quedaba entrenando con mi padre o le acompañaba a ver a mi hermano. Un día me entró la curiosidad y le dije a mi padre si me podía apuntar con mi hermano a algún equipo de fútbol y, todo ilusionado, me llevó y empecé. Hasta que llegué al Depor siempre jugué en equipos masculinos.
Le pedí a mi padre que me apuntara a fútbol y él, muy ilusionado, me llevó
¿Qué recuerdos tienes de esos años en los que eras la única chica del equipo?
Los niños siempre me acogieron muy bien, me llevaba muy bien con ellos. De hecho me costó dejar esa etapa para venir aquí a jugar con chicas.
¿Quién te llama cuando recalaste en el Orzán?
Hablaron Manu (Sánchez) -el que era el entrenador del primer equipo- y otro chico con mis padres y conmigo. Querían que empezara a entrenar con el Orzán y entrar en dinámica de Depor B, y acabé tomando la decisión de venir.
Con solo 16 años debutas con el primer equipo. ¿Qué sentiste en ese momento?
Cuando llegas a un club así el objetivo siempre es poder llegar al primer equipo y sumar los máximos minutos posibles. Te hace mucha ilusión, te ves capaz de poder llegar algún día a ese nivel. Ya fue hace dos años y recuerdo mucha ilusión de que me dieran esa oportunidad de poder demostrar que podía jugar en esa liga.
¿Cómo fue todo el tema de la lesión?
Fue ante el Victoria coruñés. En el momento que te dan la noticia te destroza; piensas mucho. ‘Uf, cuanto tiempo sin jugar, lo que me voy a perder, a ver la recuperación...’, pero tras unos días para asimilarlo ya me puse a trabajar hasta que me operaron y luego ya con fisios, readaptadores, médicos, etc. Es un club en el que te cuidan muy bien y tienen todos los medios para llevar a cabo la recuperación.
Cuando te dan la noticia te destroza; piensas mucho
¿En quién te apoyaste durante la recuperación?
En mi familia, mis compañeras, mis amigos... en toda esa gente. En el día a día mucho en mis compañeras, porque aunque estuviera al margen siempre estuvieron conmigo, muy presentes. Mi familia también, me apoyaron mucho. En toda la gente cercana a mí.
¿Y cómo se afronta el regreso de una lesión así siendo tan joven? ¿Hay dudas y un proceso psicológico por el que pasar?
Sí. Tienes esos miedos de ‘¿y si perdí todo lo que era antes? o ‘¿y si me quedo atrás y al volver no soy capaz de hacer lo que hacía antes?’ Entonces claro que hay dudas. Después de tanto tiempo parada cuesta recuperar el ritmo y volver a sentirte parte del grupo. Poco a poco vas cogiendo confianza y no me trasladaron tampoco ningún tipo de presión por si no daba el nivel o si fallaba.
Esta temporada has vestido la camiseta del primer equipo ante el Barça B e incluso fuiste titular ante Osasuna. ¿Qué valoración haces?
La idea fue ir cogiendo confianza. Empezar el año jugando con el B y ganando minutos hasta que pude ya completar los partidos. Luego se me da la oportunidad de empezar a ir convocada con el primer equipo, tuve minutos contra el Barça B y ya que Inés tenía que cumplir ciclo de amarillas era la oportunidad para que ante Osasuna jugara yo. Primero agradecer a Irene por darme esa confianza y darme esos minutos, y en mi opinión creo que hice unos partidos bastante serios. Me centré en ser contundente y a nivel defensivo creo que estuve bastante bien. Jugar con ese nivel de jugadoras es mucho más fácil, te ayudan en todo momento. Fue una experiencia muy bonita.
Me centré en ser contundente y a nivel defensivo creo que estuve bastante bien
¿Se aprende mucho de dos jugadoras que lo juegan todo y que tienen tanta experiencia como Inés y Raquel?
Sí, claro. Tienen mucho nivel y en todos los partidos lo demuestran. Estar en los entrenos a su lado y aprender de ellas me ayuda mucho.
¿Es muy grande la diferencia entre jugar con el B y el A?
Al final el B está en una categoría en la que el nivel con respecto a la del A cambia mucho. En el primer equipo tienes una exigencia, no puedes fallar, debes estar concentrada a todo lo que ocurre en el juego. Cuando saltas a la liga del A tienes que exigirte mucho más para hacer un buen partido, sino no llegas al nivel.
¿Por qué decidiste tomar la decisión de renovar con un contrato de larga duración?
Es un club en el que estás tan bien, ves que se apuesta por el fútbol femenino y hay un gran proyecto. Además siendo de casa, del Depor, y estando tan bien aquí, lo único que quiero es seguir muchos más años en este club. Lo tenía claro, se dio la oportunidad y firmé.
Debe ser muy especial jugar en el equipo que sientes.
Es un orgullo.
¿Ves un futuro con las jugadoras de la cantera teniendo peso en el Depor? ¿Crees que la línea del club es esa y que se apuesta por ello?
Eso lo puedo pensar, pero se tienen que dar muchos factores. Sí veo que se apuesta por la cantera, que hay jugadoras que pueden llegar a ser importantes en el futuro en el primer equipo. Siempre está bien tirar a veces de la casa si hay de donde sacar.