Aunque el casillero del Dépor sigue a cero, los primeros pasos en la Liga F dejan algunos detalles positivos.
Mantenerse con vida ante todo un Atlético de Madrid es una prueba más de que las de Irene Ferreras quieren llegar para quedarse.
Ahora bien, la próxima jornada se jugará en Riazor ante un Betis que tampoco ha sumado en lo que va de liga. El Dépor lo tiene todo de cara para abrir la veda de los puntos.
Encajar dos goles en la primera mitad contra un equipo como el Atlético de Madrid no pone las cosas sencillas. Aún así, el Dépor no le perdió la cara al partido y peleó por conseguir el empate.
En un día en el que costó enlazar jugadas con éxito, las blanquiazules tiraron de orgullo para mantenerse vivas hasta los instantes finales.
El gol de ADT devolvió la esperanza de sumar el primer punto de la temporada, pero el pitido que marcó la conclusión del encuentro, frustró las opciones de hacerlo. Acabaron agotadas y sin recompensa.
En la primera jornada, el Barça tuvo que combinar y mover el esférico de un lado a otro hasta encontrar el hueco para poder transformar los tres tantos. Fueron obra de jugadas enlazadas llenas de paciencia de las jugadoras culés.
Sin embargo, el pasado domingo, dos zarpazos a balón parado bastaron para batir la portería blanquiazul.
La falta de contundencia en el área pequeña a la hora de defender, ya es tarea pendiente para las de Irene Ferreras.
Esa carencia de firmeza no la tuvieron en el área rival; ADT no se lo pensó dos veces y chutó de primeras con la zurda para poner el 2-1 definitivo.
Una de las piezas claves de este Dépor está de vuelta. La delantera catalana ingresó al campo en el minuto 67 y dejó patente su talento sobre el césped del Centro Deportivo Alcalá de Henares.
Está llamada a ser uno de los mayores argumentos ofensivos del Dépor y lo evidenció al protagonizar una de las mejores jugadas del partido.
Calidad en el control, rapidez con el balón en el pie, personalidad en el recorte y ambición en el disparo; lo tuvo todo. Solo faltó el gol, que lo evitó la defensa rojiblanca.
Es una de las mayores diferencias respecto a la temporada pasada. La máxima categoría propone un ritmo más alto y el Atlético se lo hizo saber al Dépor desde el principio.
Acumuló muchas jugadoras por dentro y todas sus posesiones estuvieron llenas de verticalidad.
Paula Gutiérrez no se escondió, aunque la batalla del medio del campo la ganaron las de Víctor Martín.