El tramo final de la Liga F se acerca y, con el, empiezan las cuentas de los equipos que se juegan su plaza en la máxima categoría. 

Merced a su mejoría, el Deportivo respira hondo, aunque la igualdad de la competición impide cualquier tipo de relajación. A falta de ocho jornadas para el cierre, el conjunto blanquiazul guarda una distancia con la zona roja de tres puntos. Y lo cierto es que el calendario que le queda por delante le permite ser optimista. 

Cuatro partidos en Riazor y otros tantos lejos. Marcados en rojo, por ser enfrentamientos directos, están el del Levante Badalona (12 o 13 de abril en el feudo deportivista), Levante (19 o 20 de abril en casa de las granotas) y Madrid CFF (17 o 18 de mayo en la capital). Será allí donde las de Fran Alonso cierren la competición. 

Pero el Deportivo también tendrá piedras de las grandes en su camino hacia la permanencia. Dos huesos duros que ahora mismo están afincados en el top 5 de la clasificación. La primera será el Athletic Club (30 de marzo a las 12.00 horas en Lezama); la segunda, el todopoderoso Barcelona en la jornada 28 (3 o 4 de mayo en el Johan Cruyff). No serán menos Granada (26 o 27 de abril en Riazor) y Sevilla (10 u 11 de mayo en casa), dos equipos que ya fueron capaces de ganar a las blanquiazules en la primera vuelta.

Por lo pronto, el conjunto coruñés tendrá que afrontar este sábado (12.00 horas en Riazor) una cita con el Costa Adeje Tenerife. Precisamente ante las isleñas, el Deportivo experimentó la derrota (5-1) que les hizo iniciar la metamorfosis positiva en la que ahora se ven inmersas.