El Liceo tiene 50 minutos –en caso de no mediar una prórroga–, para sellar el pase a la final de los playoffs, en el tercer duelo contra el Noia, primero en el Olímpic de L’Ateneu, una pista que se le da bastante bien al conjunto verdiblanco.
Pese a que en la fase regular de la presente temporada los hombres de Juan Copa se dejaron dos puntos en Sant Sadurní, en las últimas siete visitas el equipo coruñés ha conseguido cinco victorias.
La única derrota, eso sí, fue todo lo alto. En la temporada 2018/2019, nada más y nada menos que por 7-1. En aquel Noia, ya entrenado por Pere Varias, estaba Marc Grau, autor de dos goles. También tres jugadores que permanecen en la plantilla rojinegra: Xavi Costa, Aleix Esteller y el meta suplente, Xus Fernández. Del Liceo siguen Juan Copa, Dava Torres y Martín Garaboa.
El empate a cinco tantos registrado el pasado 18 de diciembre, en un partido loco que los visitantes dominaban al descanso por 1-4 y que los locales acabarían igualanado con un repóker de Eloi Mitjans, fue incluso menos complicado para el equipo coruñés que el primer envite de la serie de playoffs, a pesar de la ausencia de Mitjans, quien también se perdió el segundo, sin que el club catalán revelase el motivo.
En el arranque de la serie semifinal, en una primera mitad muy abierta, el Noia sacó partido de la caraja defensiva del Liceo y se plantó en el descanso con un preocupante –por distancia y sensaciones– 2-4, pilotado por un maravilloso Jordi Bargalló: tres golazos y la asistencia del otro.
La charla de Copa en el parón lo arregló. Su equipo dominó el tiempo y el espacio y el Noia, que 72 horas antes había logrado el billete para semifinales en un partido con prórroga y penaltis, encajó un parcial de 4-0, que un tanto de Costa, con cinco jugadores de pista, dejó en 4-1 en los instantes finales.
El Liceo salió al segundo capítulo con la lección aprendida. Mandó de principio a fin y los de Pere Varias, tal vez fatigados por el maratón de tres partidos en menos de una semana, apenas opusieron resistencia más allá del descanso, al que se llegó con 3-2. De nuevo la segunda mitad dictaría sentencia, esta vez con un parcial de 2-0 y la sensación de que el conjunto catalán no estaba para dar guerra.
Por ello es difícil pronosticar qué tipo de estrategia aplicará esta noche Varias, quien en los dos primeros envites alternó el juego abierto, desinhibido, valiente con el cuadro cerrado más propio de equipos mucho más débiles y de otras épocas más defensivas del hockey patines. Tal vez por fin con Mitjans operativo, de quien la entidad sigue sin decir ni mu sobre sus ausencias, aunque en el segundo encuentro ya se vistió de corto.
El Noia ha lanzado, bajo el lema ‘el sentimiento de un pueblo’, una campaña para conseguir el ambiente más ruidoso posible en el Olìmpic de L’Ateneu en pos del milagro. Un milagro, remontar un 0-2, que en la historia de la competición solo lo han logrado el Igualada (2003/2004) y el... Noia. Aunque fue en el lejanísimo curso 2002/2003.