Un gol de Escobar cuando el partido ya expiraba hizo saltar por los aires a un Pontevedra que encadena su segunda derrota consecutiva, sin marcar además en ambos partidos, y que no perdía en Pasarón desde hacía una vuelta completa. El delantero del Bergantiños porfió por un balón dividido con Javi Rey, se levantó del suelo antes que el zaguero granate y batió a Cacharrón con la zurda. Antes, los de José Luis Lemos habían sabido sufrir y mantener la compostura frente a un rival que lo intentó de todas las maneras posibles, sobre todo tratando de abrir el juego por las bandas. El Bergan, que aún debe recuperar su partido aplazado frente al Salamanca UDS, pone fin a dos derrotas consecutivas y se queda en mitad de la tabla, casi a la misma distancia de la zona de ascenso como de la de descenso.

Con varios cambios sobre en sus respectivos onces, sobre todo por parte de Ángel Rodríguez, el choque fue un duelo táctico sobre el maltrecho césped de Pasarón, que fue poniéndose más y más pesado con el paso de los minutos, tras la lluvia caída a lo largo de la jornada. Lo más llamativo fue la presencia de Rufo junto a Charles (otra vez casi inédito) en la punta del ataque, lo que vaticinaba un bombardeo constante desde las bandas hacia el área de Santi Canedo. La única ocasión digna de mención la desperdició Alberto Rubio, que se escoró demasiado y acabó chutando fuera.

Sorprendió Lemos con un triple cambio para reforzar las bandas y tratar de contener las llegadas granates. Respondió el técnico local buscando oxigenar el centro del campo con Martín Diz, Miguel Román y Oier Calvillo. Diz puso a prueba por primera y única vez a Canedo con un chut desde la frontal que le salió raso y demasiado centrado. Con el partido roto, el Bergan se animó a montar contras cada vez más peligrosas hasta que, en una acción de fútbol directo, Escobar le puso más ganas y tuvo mejor fortuna que un agotado Javi Rey. Después del gol decisivo, lo único destacable fue el debut del juvenil Daniel Estramil en las filas del equipo de Carballo.