El Club Deportivo Tenerife volvió a poner en evidencia la debilidad del Real Zaragoza en su estadio de La Romareda, de donde se llevó la victoria, frustrando así las opciones de los maños de mirar hacia arriba en la clasificación.
El equipo canario volvió a demostrar su solvencia lejos de casa, donde solo ha perdido tres encuentros de los once que ha disputado, y sigue siendo el segundo mejor visitante de la categoría, con 18 puntos logrados, sólo por detrás del líder, Almería.
El conjunto "chicharrero", conocedor de que el equipo de Juan Ignacio Martínez "JIM", tiene un grave problema en su estadio, hurgó en la herida zaragocista y con mucho oficio y acierto rematador sacó tajada como han hecho muchos de los equipos que han pasado por el estadio maño en la presente temporada.
La afición 'blanquilla' solo ha visto ganar a su equipo dos veces esta temporada en La Romareda de diez encuentros disputados, siendo además el equipo de Segunda que menos goles ha marcado en su estadio (6), lo que se está convirtiendo en un claro lastre para sus aspiraciones de estar arriba y pensar en luchar por uno de los puestos que dan derecho a jugar la Promoción de ascenso.
El Fuenlabrada y el Oviedo ofrecieron un pobre espectáculo en el estadio Fernando Torres y firmaron tablas sin goles antes de marcharse a disfrutar del parón navideño.
La cita suponía la primera de Sergio Pellicer al frente del conjunto local y en su estreno no acometió una gran revolución en el once, en parte por la limitación que le suponen las numerosas bajas. Lo más destacable, el adelanto de Diéguez al centro del campo para jugar ahí con tres hombres y la presencia de Iban Salvador como principal referente ofensivo.
Nada de eso sirvió para desequilibrar un duelo parejo desde el arranque en el que la ocasión de gol más clara durante la primera parte la tuvieron los visitantes, con un mano a mano que Brugman no supo resolver ante la presencia de Altube y que Jirka no consiguió culminar tras el rechace del portero.
En el área contraria no faltó profundidad, pero sí pegada, aunque Cristóbal avisó con un disparo desde la frontal que pasó cerca de un poste. Por lo demás, intensidad en ambos bandos pero dificultades para generar en lo ofensivo.
Un triplete del incombustible Jorge Molina, que camino de los 40 ya es el más veterano en sumar tres goles en un partido en la historia de la Liga, permitió al Granada sumar su segunda victoria seguida en casa para alejarse de la zona de descenso al vencer este domingo en el Estadio Nuevo Los Cármenes por 4-1 al Mallorca, que puso fin a una racha de tres jornadas sin perder.
En una entretenida y vistosa primera parte, Jorge Molina adelantó a los locales y empató casi a continuación Dani Rodríguez, mientras que en el segundo acto dos nuevos tantos de Jorge Molina y otro de Antonio Puertas, los dos últimos en el añadido, certificaron la goleada local.