Enrique Graña sigue desvelando detalles de su vida, en este reportaje que es la continuación del publicado el martes de la semana pasada en este mismo diario.
“Como técnico he ido en alguna ocasión con la selección nacional. La Escuela de Entrenadores me ha galardonado con dos premios, el trofeo a la progresión y a la técnica. Guardo muy buenos recuerdos como entrenador, y muchos enfados, también, por las luchas extradeportivas, con la administración, federación, etc... Pues la temporada alta del atletismo en mi época era en agosto y mediados septiembre. De aquella en Coruña hacían espectáculos en el pabellón y no nos dejaban entrar, ¡ya te puedes imaginar el cabreo!”.
Y añade que “tuve que solicitar entrevista a Eduardo Blanco para tener una reunión con el alcalde, Paco Vázquez. Y con la ayuda de todos y de Dios conseguí que nos dejara un vestuario para los hombres y otro para las mujeres”.
Insistencia
“Como te indico, he gozado mucho, me he sacrificado mucho, y he dado lo mejor de mi persona en horas y dedicación. En pro del niño, joven, adulto, persona, atleta... Era el entrenador de la Federación y conseguí, por mi insistencia, en ir a la calle a buscar atletas, y así me ves peregrinando por el colegio de Las Esclavas, Santa María del Mar, Escolapios...”.
“Ya te puedes imaginar, lidiando con profesores de Educación Física. Lo primero que tenía que hacer era razonar, hablar y conquistar a estos. Y fue fructífero, pues después de varias selecciones, conseguí enamorar para el atletismo a Gerardo Martínez Manso, que en campo a través con Abascal hizo grandes duelos. Miguel López Cordal, Paco Seoane, Gaspar, José Antonio Varela Calviño, Rosa Paz, Teresa y Dolores Rojas, Antonio Alfeirán, Manuel Vázquez Toja, Emilio Rogel Daparte, Elena Souto Pellicer, Dolores Tasende, Vicente Veiga, Jorge Nahia, Cesar Fontenla... Roberto Pérez competía con Fermín Cacho como junior y andaban a la par ambos. Su mejor marca fue de 3.39 en 1.500” .
“Roberto García, Antonio Aradas, aparte de otros, como el recientemente fallecido Mariano Castiñeiras, Javier Fernández Feijoo, Carlos Iglesias, José Antonio Sordo, Bernardo García de Paz, Tito Fernández, María José García Patiño, que después se fue a la Blume actual y llegó a ser olímpica, y otros muchos más, que no deseo olvidar y que los tengo en mi corazón”.
“Me acuerdo como anécdota que en un Campeonato Gallego absoluto , en una final de 800, seis eran atletas entrenados por mí. Y en un Campeonato Nacional absoluto, femenino, en la final de 400, 3 eran entrenadas por mí, donde fue primera Teresa Rojas, tercera Elena Souto y quinta Rosa Paz. Y María José Martínez Patiño primera en 100 y en 200. Luego se especializó en 100 vallas. Pido disculpas, a los que no menciono, presentes y a los que no pude atender mejor”.
Tarea imposible
“No pude compaginar la parcela de padre, trabajo y entrenador. Cada vez me exigía más horas. Y con muchísimo dolor de corazón tuve que ir dejándolo. Dejé a tres colaboradores, que hiciesen parte de mi labor en la pista: Emilio Rogel, que tuvo que retirarse como atleta, prematuramente, por un accidente al salir de una competición en el pabellón y fue el entrenador que descubrió a Andrés Diaz, a Antonio Aradas y a Manuel Vázquez Toja. A ellos les doy las gracias por su labor en pro de la causa”, señala Graña.
“Indicar de que como atleta disfrute y sufrí. Pero tú que eres entrenador ya sabes la máxima. Si el atleta hace buenas marcas, es porque él mismo es bueno. Y si las hace malas, es porque el entrenador es malo. Una pena esto... ¡pero es una realidad y me da mucha pena”.
También analizó cómo ve el este deporte en los tiempos actuales. “Sí noto diferencias en el atletismo actual. Teníamos antes temporada invernal, campo a través, pista cubierta, temporada primaveral, previa a la alta competición de pista, julio, agosto y mediados de septiembre. Ahora, por lo que aprecio, no hay mucho campo a través, y sí mucha carrera popular, en asfalto. Y la temporada alta termina antes. No lo entiendo muy bien, pues a nivel mundial la Europe-Diamond League empieza a finales de mayo y termina a mediados de septiembre. Es decir siguen la pauta de lo que yo conocí, como temporadas plenas de atletismo. Pero me imagino que quien marca el ritmo es la Federación Española, ¿no? Pero bueno, hay que adaptarse al ritmo pautado y preparar los microciclos y toda la planificación en cada ciclo”.
Como conclusión, Enrique Graña destaca que “hay muchos detalles que desearía contarte y que quedan ahi. Pero si puedes me gustaría indicar dos cosas: que mi querido hermano Jenaro (q.e.p.d.), me ha ayudado muchisimo en el atletismo y en la vida (fue como un padre)... Y lo siguiente es que en mi época de entrenador estaban los siguientes técnicos, y muy buenos en sus disciplinas; Santiago Piñeiro (carreras),Ramon Tasende (saltos) y Raimundo Fernández, un grandísimo referente en lanzamientos. En Santiago en el CUA (Club Universitario de Atletismo), Mariano García Verdugo y su esposa, realizando una gran labor”.