“Llegó el día, ese día que nunca había pensado ni imaginado”. Así empieza la carta de despedida de Blas Alonso como futbolista del Fabril. El canterano deja el club al que llegó con solo diez años tras llegar a un acuerdo para su salida y acabará la temporada en el Unionistas de Salamanca, rival del filial blanquiazul en el grupo1 de Segunda División B.

El lateral derecho y uno de los capitanes del filial blanquiazul llevaba tres partidos sin entrar en la convocatoria y  sabía que el cuerpo técnico no contaba con él. Blas y el club rescindieron su contrato de mutuo acuerdo y hoy a las 13.00 horas será presentado como nuevo futbolista del Unionistas.

Uno de los pocos coruñeses de la plantilla, pieza clave en el ascenso a Segunda B y en la mejor temporada histórica del filial en la categoría de bronce, se despidió con una carta que publicó a través de las redes sociales. “Hace ya más de doce años emprendimos una vida juntos, era el comienzo de un sueño y de un largo camino, temporadas y temporadas en las que aprendí, además del fútbol, unos valores esenciales en el día a día y un sentimiento único por un escudo que siempre irá contigo”, explica.

Blas ha querido agradecer “a todos los compañeros y amigos que tuve estos doce años, a todos mis entrenadores, cuerpo técnico, fisios, utilleros, doctores y readaptadores, en general a todos los que componen el club. Y, sobre todo, agradecer a la afición, que es lo más importante de este club, todos los ánimos y apoyo que me han transmitido en estos años”.

La baja del lateral derecho deja al Fabril con 21 fichas –Arturo Segado y Juanmi, dos de los últimos fichajes, tienen licencia con el Laracha– y un hueco libre en la plantilla. La dirección deportiva trabaja para incorporar a un delantero antes del cierre del mercado.