El último entrenamiento de la semana ha sido el primero para Íñigo López, que tras haber sido detenido en el marco de la Operación Oikos por haber participado, presuntamente, en una trama de amaños de partidos, se ejercitó con el equipo coruñés en Abegondo.
Fue uno más y se le vio sonriente en su regreso al trabajo. Al final de la sesión, el club no permitió a los periodistas y fotógrafos acercarse a él.
López fue detenido a primera hora del martes y trasladado posteriormente a Huesca para prestar declaración.
El jueves, López fue puesto en libertad con cargos por corrupción y cooperación en estafa y organización criminal, con una fianza de 75.000 euros y todos los días 1 y 15 debe presentarse en el juzgado o dependencias policiales.