Curtido en mil batallas en el fútbol de élite, Eneko Bóveda no se amilana ante la crisis actual de juego y resultados por la que atraviesa el RC Deportivo de La Coruña.

Así, ve al equipo capacitado para pasar página a su mal momento actual —cerca de las diez últimas jornadas, donde se deciden los campeonatos— y confía en una reacción con la que el objetivo de finalizar la Liga entre los dos primeros sea un objetivo tangible y alcanzable.

“No creo mucho en demarrajes... al final, el primero y el último partido puntúan igual. Da igual que si los consigues antes o al final (los puntos). No creo que un equipo pueda elegir cuando ganar más o menos partidos. Tampoco estamos lejísimos de donde queremos estar. No quiero ser conformista, pero sí cauto. Sigo creyendo que los puestos cabeceros están a nuestro alcance”, manifestó.

1 Preocupación lógica en el vestuario
La mala racha en los cuatro últimos encuentros, con tres empates y una derrota, ha generado un sentimiento de recelo en el entorno de un equipo como el coruñés, que partía como uno de los más firmes candidatos a militar el próximo año en Primera.
“Tenemos una preocupación lógica. Tenemos unos objetivos y para conseguir ese objetivo hay que ganar muchos partidos y cada partido que no ganamos nos aleja. Nos preocupa y sobre todo nos ocupa a la hora de analizarlo, analizarnos y darle una vuelta todo”, expuso.

2 No vio a un Depor bloqueado
Aunque el Depor no brilló ni mucho menos ante la UD Las Palmas, el ‘24’ deportivista no considera que su equipo se paralizase en esta cita.

“No coincido en que hubiera bloqueo. Sin ser un buen partido, fue un duelo disputado que podría haber caído para cualquiera de los dos lados. Se vio el nivel de Las Palmas, que es alto y parecido al nuestro. Las cosas no les han salido bien, pero antes de empezar el año, miras la plantilla y somos dos plantillas potentes, parejas y el partido salió así. No estamos contentos con el partido, pero no vi al equipo bloqueado ni que le pasara por encima una apisonadora”, dijo.

3 El plantel sigue respaldando a Natxo
Preguntado acerca del compromiso de la plantilla con un entrenador como Natxo González, que comienza a estar cuestionado por un amplio sector del deportivismo, el vasco deja claro que la fidelidad del vestuario permanece intacta.

“Tenemos claro quién es el jefe, al igual que el día uno, estamos igual. Cuando uno está dentro lo que sirve es la autocrítica, cuanto más personal mejor. Los jugadores estamos convencidísimos de en qué barco estamos, hacia dónde navegamos y sabemos que tenemos más para dar”, agregó.

4 El análisis, mejor hacerlo en frío
A la hora de establecer las causas del bajón de rendimiento actual del RC Deportivo como bloque, Bóveda prefiere tomar aire de modo profundo y huir de las calenturas.

Los titulares del domingo mantuvieron al final del entrenamiento de ayer una charla de diez minutos en la que buscaron el origen de los males que están lastrando al club.

“Se dice de todo (en este tipo de reuniones). Al final hablas, hablas de acciones puntuales, cómo te encontraste, individualmente, como equipo... las primeras horas no sé si son las mejores para sacar conclusiones claras. Está el calentón, la rabia de que un rival celebre una victoria en tu casa y según pasen las horas todos los análisis tendrán un poco más de valor”, precisó.

5 No sabe si pasa factura la presión
El polivalente zaguero, que entró en el equipo titular ante la UD Las Palmas en detrimento de David Simón, no está seguro acerca del modo en que la presión de actuar como local le está pasando factura desde el plano psicológico al equipo herculino.

“No lo sé. Siempre digo que al final somos 25 jugadores, salen 11 o 14 al campo y a cada uno le pasa por la cabeza lo que le pasa. A uno le influye el público, a otros las sensaciones del partido... lo que sí es cierto es que tienes tres partidos en casa, uno que te dan por ganado y viendo que estábamos ganando todos en casa es lógico que la gente fuera optimista. Que fuera un mes en el que podíamos mejorar la situación. Se le puede dar la vuelta y pensar que por qué no vamos a ganar lo que queda fuera...”, significó.

6 El equipo volvió a encajar al final
Un nuevo gol recibido en el último cuarto de hora del encuentro —ya van diez en la presente campaña— impidió poder puntuar a un Deportivo que ha perdido comba respecto a los dos puestos de privilegio en la clasificación.

Bóveda transmitió que, en su opinión, no existe una causa real para esta tendencia.
“No sé cómo explicarlo. No sé si es una casualidad, son cosas que ahora, a 12 horas del partido... seguramente con la cabeza más fría se pueda hacer un análisis de cómo se pueden afrontar diferentes fases del encuentro o si es que estamos fallando en alguna de esas fases. Hay una acción determinante que es la expulsión de Edu Expósito”, apostilló.