Después del 0-5 ante el SD Logroñés, Imanol Idiakez siguió confiando en el mismo once inicial, sin sorpresas, ante un Tarazona ultradefensivo que planteó una línea de cinco defensas en Riazor.
Desde los compases iniciales los deportivistas se mostraron sumamente imprecisos en sus movimientos, con dificultad para dotar a su juego de la profundidad necesaria para desbordar.
Los aragoneses amenazaban los dominios de Germán Parreño con timidez, presionando muy arriba, mientras que Lucas Pérez no atinaba a embocar a gol un servicio de Yeremay en el minuto 15.
Cuando el partido parecía que se iría al intervalo con empate sin goles, una jugada de ‘crack’ de David Mella brindaba un servicio de gol que Barbero no desaprovechaba.
El choque se le ponía de cara a los herculinos, con más oficio que despliegue de juego ofensivo.
En la segunda parte, el Deportivo saltó sin cambios frente a un Tarazona que busca la contra, dejándole la posesión a los herculinos.
El triple cambio de los aragoneses despistó al Deportivo, que concedió el tanto del empate.
La estrategia volvió a darle sus frutos al cuadro de Idiakez, con un centro de Lucas Pérez perfecto y gran remate de Pablo Vázquez.
El propio ‘7’ transformó una falta en el 3-1 y Alcaina sentenció en el 87 con su segunda diana desde su llegada. Partido con sufrimiento pero con final feliz. l