Ante todo, lo primero que quiero decirles hoy es que todo lo que les voy a contar es rigurosamente cierto, que poseo unas capturas de pantalla en mi móvil y que están a disposición de todo aquel que quiera comprobarlo. A mí aún me resulta difícil de asimilar.

Una amiga se ha puesto hoy a trastear con su móvil y se ha metido con eso de la inteligencia artificial, el chat GPT y todas esas cosas. Y en una de estas ha escrito en el chat de marras la frase “háblame del penalti de Djukic”. Pues bien, el chat le responde diciendo que sucedió en la temporada 93-94, que fue uno de los momentos más recordados, que fue en la última jornada de liga (hasta ahora todo bien) y que fue un partido entre el Valencia y el … ¡¡¡Celta de Vigo!!! (primera en la frente) y que el Valencia se jugaba ganar para ir a la Champions!!! (segunda en la frente). Continúa diciendo que en el minuto 89 se pita un penalti a favor del … Valencia!!! (ya van tres) y que lo lanzó el especialista Djukic fallándolo y dejando al Valencia sin ir a la Champions. Pero nada, que en la final de Copa de ese mismo año Djukic marcó otro penalti y le dio el título al Valencia (error, tras error…). Mi amiga, que no sabía donde meterse ante este despropósito, escribió en el chat GPT esta frase textual: “te lo has inventado todo, no es así”. Pues bien, el chat erre que erre, se ha disculpado, ha debido hacer otra búsqueda de las suyas y no sólo se ha reiterado en lo anterior si no que lo ha rematado diciendo que Djukic era el lanzador suplente ante la ausencia de Fernando, que ya no estaba en el campo, y que llevaba esa temporada 14 de 15 penaltis marcados (y eso que era el segundo lanzador!!!). No se corta el chat GPT y remata el disparate diciendo que al año siguiente Djukic se desquita marcando 28 goles en toda la temporada. Ver para creer…

Mi amiga sigue sin dar crédito y le dice al chat GPT que aquel partido no fue frente a los celestes. El chat rectifica y dice que, efectivamente, el partido fue ante el Deportivo, pero sigue en sus trece con que Djukic jugaba en ese momento en el Valencia y que el penalti se lo paró … Liaño!!! (madredelamorhermoso…).

No les quiero marear más con este despropósito continuo de esto que le llaman inteligencia artificial. Ya sé que es difícil de creer, pero mi amiga terminó este disparate leyendo en el chat que Djukic no había entrenado bien esa semana porque había sido padre de gemelas, que Guus Hiddink, que entrenaba al Valencia, no viajó a Coruña por un ataque de apendicitis, que hubo una amenaza de tsunami en las costas gallegas y que a Liaño le había caído una gaviota durante el partido, pero que esto último no estaba comprobado.

Lo sé, todo esto que les he contado parece delirante, pero créanme, le ha sucedido hoy mismo a una amiga mía trasteando con el móvil y con el chat GPT ese que está tan de moda. Supongo que toda esta tecnología irá evolucionando y que en un futuro cercano nos será de mucha utilidad, pero lo que es a día de hoy parece que está un poquito verde todavía.

Por lo demás, hoy jugamos contra el Ceuta, el mejor de la segunda vuelta, el Fabril puede ascender a Segunda RFEF y las chicas del Depor Abanca pueden afianzar también su ascenso. Hoy puede ser un gran día.

La próxima vez le diré a mi amiga que le pregunte al chat GPT por el centenariazo. Igual nos echamos otras risas.