No nos queda tan lejos el día en el que le ganamos 1-2 al Arenteiro con aquella vaselina de Davo que nos dio una victoria importantísima y que le dio otra vida extra a Idiakez. Aquel partido dio paso al parón navideño en el que nos pasamos esas dos semanas y media hablando día sí y día también del mes de enero que nos venía con los enfrentamientos ante los cuatro primeros. Lo que sucedió ese mes de enero y lo de febrero y también lo de marzo todos lo sabemos, pero no sé si recuerdan que entre esos ‘cuatro primeros’ estaba la Real Sociedad B, que llevaba tres partidos sin ganar pero que llevaba una liga verdaderamente excepcional hasta ese momento. Hoy, la Real B está perdida por la mitad de la tabla, a diez puntos del play off, y ya nadie piensa en ellos para disputar la primera plaza. Estuvieron catorce jornadas invictos y ahora llevan otras catorce donde solo han ganado un par de partidos últimamente. Y no son los únicos a los que les ha pasado algo parecido.
¿Qué quiero decir con esto? Pues que parece que este año no hay ningún equipo que sobresalga sobre los demás. Todos han tenido su rachita buena y todos han tenido sus semanas en las que no les salía nada. Y por eso, después de los dos empates consecutivos antes de visitar al Rayo Majadahonda, seguimos conservando el liderato. Hemos conseguido dos puntos de seis posibles y no nos han superado, cuando lo normal es que los equipos de arriba ganen cada semana.
Todos los equipos han experimentado bajones. Todos. Hace dos semanas parecía que el partido ante el Nàstic era el partido del año. Ahora mismo parece que ese partido del año será el que nos enfrente al Barça B en la jornada 36. El filial azulgrana es el que está mejor ahora, con siete victorias y dos empates en las últimas nueve jornadas, pero también tuvo su mal momento entre las jornadas 13 y 19, donde sólo le ganaron al vecino Cornellá. Es el que está mejor ahora, pero ya veremos más adelante. A día de hoy, ojo a esa jornada 36 en Riazor.
Luego están los que iban como motos y ahora van a empujones. La Cultural Leonesa tuvo una racha excelente entre las jornadas 6 y 17 donde ganaron nueve de esos doce partidos y que, sin embargo, ahora llevan sin ganar desde, curiosamente, el partido ante el Deportivo. Nueve partidos sin sumar de tres, nada menos. Su rival provincial, la Ponferradina, el máximo candidato al ascenso, también tiene sus rachas: hasta la jornada 19 iba más o menos bien y, desde entonces, ha sumado sólo dos victorias en diez partidos. ¿El Nàstic? Pues otro que va a tirones. De la jornada 1 a la 6 intratable, de la 7 a la 13 no le ganaron a nadie, de la 14 a la 23 ocho victorias de diez partidos, y de las cinco últimas sólo le han ganado al Arenteiro. Y para acabar pues tenemos al Fortuna, que entre las jornadas 5 y 18 ganaron 11 de esos 14 partidos y que, a partir de ahí, pues solo ganaron dos partidos más. Y que les siga la mala racha, por supuesto.
Y en esas andamos nosotros, que llevamos hasta antes de enfrentarnos al Rayo Majadahonda, una racha muy buena, en general. De los últimos 14 partidos hemos ganado 10, que no está nada mal. Esto me empieza a recordar a la temporada 2013-2014, la de nuestro último ascenso a Primera, en la que sólo ganamos un partido de los últimos siete y aun así subimos. Si el resultado final es el mismo, yo lo firmaba ahora mismo, por supuesto.
Ahora bien, lo mejor es seguir ganando. Así se asciende seguro. Y los rivales que hagan lo que quieran.