En un partido sin los primeros entrenadores en el banquillo por sanción, el RC Deportivo recuperaba a Pablo Martínez como pareja en el eje de centrales de Pablo Vázquez, mientras que el resto de su formación era idéntica a la que doblegó la semana pasada al Lugo.
En el Nàstic Vidal hacía un par de modificaciones respecto a su once frente al Arenteiro, efectuando una presión muy alta con la que tratar de maniatar a un Deportivo que con espacios genera mucho peligro.
Los tarraconenses salieron mentalizados para ponerse por delante en el marcador, generaron oportunidades que testaron los reflejos de un gran Germán Parreño y vieron truncado su planteamiento en la primera parte con la lesión de Sanz.
Lo mejor que le pudo pasar a los de Idiakez antes del descanso fue llegar con el 0-0 inicial.
En la segunda parte no hubo modificaciones en ninguno de los dos equipos, con un Deportivo que muy pronto se puso en ventaja con una contra culminada por Mella tras un gran pase de Iván Barbero.
Los herculinos iban aguantando el resultado con solvencia hasta el minuto 78, cuando un gran centro de Concha que puso en bandeja el empate a Pablo Fernández.
El goleador local cayó lesionado, todo un alivio para un Deportivo que mantuvo el tipo, ganando el golaveraje a los rivales. Lo mejor, el resultado. l