Empate del Dépor en su primer compromiso de los tres que disputarán los de Imanol Idiakez esta semana en Portugal. Se nota que los blanquiazules se midieron a un rival más exigente que Ourense CF y Pontevedra. Esta vez no se pudo lograr el triunfo, pero hay que quedarse con lo positivo de este nuevo test de pretemporada. El equipo sigue siendo muy competitivo, y no bajó los brazos cuando iba perdiendo por dos goles de diferencia.
El Dépor hace bastante tiempo que no pierde. Tampoco suele ir por detrás en el marcador. Y que siga así, aunque sea en partidos en los que no se juega nada. Un principio que intentará aplicar también hoy, cuando los blanquiazules se midan al Gil Vicente.
Aquí es donde tendrá mucha importancia la profundidad de banquillo. Hay que dar minutos a todos, como corresponde cuando se juegan dos partidos en dos días. Así que los menos habituales tendrán su oportunidad, en esa parte de la pretemporada en la que todos quieren ganarse la confianza del entrenador.
Los jugadores pudieron vivir ayer un partido complicado, que les vendrá muy bien a la hora de afrontar los duelos que le esperan en Segunda. De eso se trata, de ir poco a poco superando obstáculos cada vez más altos.
La plantilla del Dépor intentará hoy retomar la senda del triunfo. Todos quieren ganar, aunque sean amistosos. Y a ver si, además, consiguen que, esta vez, la portería se quede a cero.