El Leyma Coruña afronta esta noche un partido frente a un rival directo como el Girona. Uno de esos compromisos en los que, independientemente del resultado, también hay que fijarse en la diferencia de puntos. Por si acaso. Y es que tanto unos como otros es muy probable que estén luchando por la permanencia a lo largo de toda la temporada.
Con una rapidez pasmosa ya hemos cubierto más de una cuarta parte de la liga regular. Desde finales de septiembre, el equipo de Diego Epifanio ha vivido un poco de todo. Y ahora busca un cuarto triunfo que le haga distanciarse del colista.
Habrá que ver cómo afronta la plantilla este importante compromiso sin la presencia de Gus Lima. Las lesiones también entran dentro de lo previsible. De todas formas, los naranjas tienen que sobreponerse a todas las adversidades. La victoria sería un trampolín perfecto para empezar a mirar hacia arriba.
¿Y si hay derrota? Tampoco se acaba el mundo. Lo que han demostrado estos primeros diez partidos es que la igualdad es máxima. Cualquiera puede caer en cualquier cancha, como le pasó al Real Madrid en la primera jornada. No hay ningún equipo descolgado, entre las ocho victorias del Valencia Basket y las dos del Girona. En ese espacio, 18 equipos luchan por estar lo más arriba posible, cada uno con sus objetivos.
Así que, mucha suerte al Leyma para el partido de hoy. A pesar de su importancia, creo que el equipo coruñés tiene mucho que ganar y poco que perder. Todavía queda tiempo para enmendar errores. Y muchos partidos en el Coliseum, donde seguro que se conseguirán más victorias con el apoyo de esa afición que se ha volcado con los suyos desde el primer momento.