El Deportivo de Imanol Idiakez apostó por la continuidad en el duelo ante el Nàstic de Tarragona en Riazor, con un once prácticamente idéntico al que venció 0-1 en la Nova Creu Alta, con la única salvedad de la entrada de Pablo Martínez en la vacante del lesionado Jaime.

El Nàstic puso en liza un sistema 4-4-2 con que consiguió maniatar a los herculinos en los compases iniciales, con un Andy sobresaliente que rozó una diana antológica desde el centro del campo.

Con el paso de los minutos, y después de que el colegiado anulase correctamente una diana al visitante Pablo Fernández, el Deportivo fue haciéndose con el control de la posesión.

Las jugadas de peligro tardaron en sucederse y no sería hasta el minuto 46 cuando los blanquiazules gozaron de su mejor opción por medio de un disparo de Hugo Rama desbaratado por Varo.

En el segundo lance, el Deportivo espabiló, con una marcha más y más adelantado, cogió una velocidad diferente, generando y llegando con peligro.

Lucas Pérez dispuso de una ocasión tremenda pero el delantero coruñés sigue peleado con el gol esta temporada.
Vidal movió el banquillo para intentarse sacudir la presión local pero no surtió efecto.

Un gran centro de saque de esquina de Lucas puso en bandeja el 1-0, obra de Pablo Martínez; la estrategia dio recompensa, en un partido en el que el rival acabó con diez por roja a Concha. El Depor de diez en la segunda parte.