El Deportivo siguió apostando por el armazón principal de su once tipo, con las dos únicas novedades de la titularidad de Jaime y Rubén López en las vacantes dejadas por José Ángel y Villares, respectivamente.

Los dos contendientes, con un sistema similar 4-3-3, optaron por un inicio muy conservador, en el que apenas se asomaron en campo contrario; se notaba lo mucho que había en juego. Los blanquiazules saltaron con valentía pero fueron replegándose de modo paulatino.

Ambas formaciones tuvieron que emplear un cambio por lesión; en el minuto 17 Muguruza saltaba en lugar de Calderón y en el 37 Pablo Martínez, aturdido tras un cabezazo con un rival, fue reemplazado por Ximo Navarro.
Cuando todo parecía que el encuentro se iría al descanso con 0-0, un error encadenado de la defensa deportivista propició un centro que Muguruza remataría a placer en las inmediaciones del marco de Germán Parreño, que minutos antes había salvado un remate duro de Martín Solar.

En el segundo acto, con un 1-0 en contra, el Deportivo optó por salir con los mismos pero poco a poco iba perdiendo gas; por la banda de Davo quizá se creaba algo de peligro, mientras que Lucas Pérez rozó un tanto olímpico.
El equipo estuvo desasistido y desorganizado; a la desesperada en los últimos minutos saltó al campo Barbero para que se reincorporando pero apenas pudo aportar nada.