Santi Brandariz, centrocampista del San Tirso que el próximo mes cumplirá 44 años, fue uno de los goleadores de su equipo en el duelo más vistoso de la primera jornada de Preferente, que terminó con resultado de empate a tres frente al Sofán.
“Lo hablamos en el descanso, cuando íbamos 1-1. En campos como el del Sofán o el nuestro los partidos dan muchas vueltas, porque se llega rápido a las áreas y hay muchas jugadas a balón parado. Si se ponían por delante teníamos que estar tranquilos, porque se podía remontar. Y así fue, metimos un gol y al cabo de un minuto otro, para un empate final que yo creo que fue lo justo”, analiza el mediocentro sobre el partido.
“Son un buen equipo y en su campo aprietan mucho. Contentos con el punto, porque empezar sumando fuera es importante y da una buena vibración al equipo”, continúa.
Uno de los secretos para su longevidad deportiva es el buen trabajo que realiza antes del inicio de liga y la ausencia de problemas físicos: “Hicimos buen trabajo en pretemporada. Nunca me suelo lesionar, por eso sigo jugando. No tuve molestias y empiezo bien”.
El San Tirso no plantea los partidos igual en casa que fuera, pero Santi reivindica la capacidad de su equipo para manejarse en todo tipo de escenarios. “A veces nos cuesta más, por las dimensiones de nuestro campo, pero tenemos jugadores para los dos tipos de campo, tanto grande como pequeño”, manifiesta.
Durante la semana trabajan diversos sistemas tácticos, y con el elegido para el domingo tienen buenas sensaciones: “Jugamos con defensa de cinco, tres centrales y dos carrileros. Las veces que jugamos así solemos encontrarnos bastante cómodos”.
Les toca pensar ya en el duelo ante el Sofán. “Complicado. Vienen de hacer un buen año; más o menos siguen con la misma gente y se han reforzado bien. Sobre todo al principio, cuando no se sabe bien quien va a estar abajo y quien arriba, siempre son complicados todos los partidos. Son un equipo hecho para pelear los primeros puestos”, explica sobre el choque.
Decidió seguir
Ya en un plano más personal, analizó lo que está suponiendo el San Tirso para él en el tramo final de su carrera. “Cuando el Arteixo decidió no contar conmigo (al término de la temporada 2020/21), dudé mucho si continuar o no. Fueron sobre todo mi mujer y mis niñas quienes me dijeron que no me podía retirar así, que tenía que seguir jugando y a mi el San Tirso (resopla) me vino muy bien. Es un club que llevaba años intentando ficharme, pero yo siempre había elegido otras opciones”, confiesa.
“Me vino súper bien, porque es un club humilde, pero que trabaja muy bien, que le da mucha tranquilidad al jugador. Lo tiene todo. Encontré un equipo, primero con Héctor y luego con Fabio de entrenadores, el trabajo del cuerpo técnico, el ambiente con los compañeros..., estoy muy agusto”, reitera Brandariz.
“Estoy encantado, me apena tener la edad que tengo, porque estaría jugando con ellos un montón de años”, añade.
“Somos César y yo de 43 años. Les quitamos veinte años a muchos, pero la verdad es que creamos un grupo humano muy bueno”, finaliza.